Click acá para ir directamente al contenido

Cinco cambios necesarios

Por Ximena Rincón, senadora por la Región del Maule

2 de mayo de 2013

Imagen foto_00000014Uno de los temas más relevantes y presentes en la discusión pública y política de los últimos años ha sido, sin lugar a dudas, el tema energético. La energía es clave para el desarrollo del país, de nuestras ciudades y empresas.

 

Los altos precios de la electricidad, la contaminación de nuestras ciudades, la escasez del suministro eléctrico, que se avizora para unos años más, son temas que obviamente debieran ocupar la primera línea de la agenda gubernamental y parlamentaria.

 

Pero la paradoja es que, lamentablemente, en el Gobierno no vemos que este tema se haya tomado con la seriedad y la altura que se escucha en los discursos.

 

De más está decir que han pasado cuatro ministros liderando la Cartera de Energía. Con la pretensión que caracteriza a este Gobierno, el mismo que califica cada una de las acciones que realiza como la “más importante”, la “mejor de la historia”, hace más de un año y medio lanzó un documento que consideró la “guía de las próximas décadas”, y hasta el momento no vemos concreción alguna de esta política. 

        

Como miembro de la Comisión de Minería y Energía, quiero ser clara en afirmar que el único avance concreto en materia de energía que hemos tenido en el último tiempo en este Senado, ha sido una moción parlamentaria, transversal políticamente en su origen y aprobada unánimemente en esta Sala en enero del año 2012 , que dispone una meta del 20 por ciento de Energías Renovables No Convencionales para el año 2020 en nuestra matriz energética, y paradójicamente esta legislación no ha avanzado ni un centímetro en la Cámara de Diputados.

 

Chile no requiere ni pide subsidio en materia de Energía Renovable No Convencional. Nuestro país optó por la fijación de cuotas. Y la cuota en nuestro país es de un 5% y en datos de este Gobierno, el año 2012 la inyección efectiva de Energía Renovable No Convencional excedió en más del 30% la cuota fijada, y la proyección de este año 2013 (cifra de Gobierno), es doblar la cuota exigida.

 

No es un tema de subsidio ni de costo, sino de cuál es nuestra ambición en materia energética, y cuál es nuestra apuesta en este sentido.

 

Cuando se presentó el proyecto de ley sobre concesiones eléctricas, el Gobierno afirmó que esta iniciativa era de especial prioridad, porque venía a solucionar las barreras que estaba enfrentando el sistema de transmisión en nuestro país. No podemos estar más de acuerdo con esa afirmación, y comprendemos la importancia del proyecto. Y así lo demostró la Comisión y los asesores técnicos de los senadores, que se pusieron a trabajar intensamente para lograr su despacho positivo. Lamentablemente, en el seno del Gobierno no encontramos la misma fuerza y la misma respuesta, no de parte del Ministro, sino que del Subsecretario y de sus asesores.

 

El pasado miércoles 10 de abril un grupo de senadores, entre los cuales me incluyo, acordamos con el Ministro Cristián Larroulet y el Ministro Jorge Bunster postergar la votación del proyecto de concesiones para la semana recién pasada, a objeto de  tener esos días para poder consensuar las distintas indicaciones que se habían discutido por tanto tiempo en el seno de la Comisión y que en esos días íbamos a conversar, discutir y analizar esas observaciones.

 

Nuestra propuesta de indicaciones fue enviada al Subsecretario de Energía el miércoles 10 de abril y no tuvo respuesta formal sino hasta el lunes 29 de abril, a las 14 horas en circunstancias que debía votarse la iniciativa al día siguiente.

 

¿Esa es la prioridad que el Gobierno le asigna a esta materia? ¿Es razonable pensar que el Gobierno quiere trabajar seriamente con los Senadores el perfeccionamiento de este proyecto si demora 19 días en responder, con solo 24 horas de anticipación a la votación de un proyecto tan importante como aquí se ha señalado?

 

El proyecto es muy relevante para el desarrollo de la transmisión eléctrica de nuestro país, pero no estoy disponible para pasar a llevar los derechos de todos los chilenos, las áreas silvestres protegidas, los derechos de nuestros pueblos indígenas, entre otros, y el Gobierno no ha mostrado disposición a trabajar seriamente el perfeccionamiento de la iniciativa.

 

Le hemos planteado 5 puntos al Ejecutivo.

 

Primero: hacer obligatoria la consulta indígena del Convenio 169 de la OIT en el caso que una concesión atraviese territorios indígenas y establecer la obligación para buscar alternativas de trazado siempre que una concesión traspase territorios de áreas silvestres protegidas del Estado.

 

Segundo: ampliar las causales para deducir oposición.

 

Tercero: ampliación de la legitimación activa para deducir oposiciones a la solicitud de concesión.

 

Cuarto: asegurar la idoneidad y autonomía de los peritos tasadores. La propuesta enviada establece ciertos requisitos adicionales a los establecidos, designación por sorteo y causales de inhabilidad por conflicto de interés, similares a las establecidas para directores independientes de sociedades anónimas.

 

Quinto: Posesión material de los terrenos. El proyecto de ley establece que el concesionario puede tomar posesión material de los terrenos aun cuando se encuentren reclamaciones pendientes, siempre que se haya pagado el valor fijado por la comisión tasadora. En este caso, se propone que si existen reclamaciones distintas al precio, no se puede realizar la posesión material de los terrenos.

 

Creo que estos temas son de verdad importantes para nuestro país. Hemos abierto nuevamente un espacio de negociación directa con el Ministro de Energía, esperamos que en un trabajo directo con él podamos avanzar decididamente en pos del desarrollo de nuestro país.

Imprimir