Una veintena de indicaciones recibió proyecto de muestras y contramuestras agrícolas
La Comisión de Agricultura realiza el análisis del articulado de la iniciativa que apunta a regular el procedimiento del análisis y de medición de algunos de los productos agrícolas.
27 de noviembre de 2012Más de 20 indicaciones recibió el proyecto, en segundo trámite, que regula las transacciones comerciales de productos agropecuarios, más conocido como proyecto de "muestras y contramuestras" y que son analizadas por la Comisión de Agricultura, que preside el senador Juan Antonio Coloma.
La iniciativa apunta a resolver las eventuales controversias que se produzcan en los procesos de transacciones comerciales de productos agropecuarios y también busca establecer mecanismos e instrumentos que contribuyan a la transparencia dichas transacciones.
Las modificaciones presentadas son de autoría en su mayoría del Ejecutivo, de acuerdo a sus facultades y del senador Eugenio Tuma.
En esa línea se propone que "esta legislación regule con carácter obligatorio el procedimiento de análisis de muestras y contramuestras y medición, según corresponda. Asimismo se trata de circunscribir el ámbito de aplicación de esta legislación a los cereales más que a los productos agrícolas en general".
Asimismo se trata de definir el procedimiento y reglamentos para que los laboratorios pertenecientes a agroindustriales o intermediarios puedan analizar las muestras de los productos, siempre que se registren como laboratorios de ensayo conforme a las normas establecidas.
Dichos laboratorios quedarían sujetos a la fiscalización e inspección del Servicio Agrícola Ganadero. Asimismo se definirán los protocolos de custodia que garanticen la inviolabilidad y la conservación de las contramuestras.
Otro aspecto que tendrá que zanjar la Comisión de Agricultura es quién y en qué casos asumirá el costo del análisis de la contramuestra, ya sea el productor, el agroindustrial o intermediario.
En lo fundamental, la iniciativa del gobierno apunta a resguardar a los pequeños y medianos agricultores transparentando las operaciones comerciales, toda vez que las partes no suelen concurrir a ellas en igualdad de condiciones, ya que algunos carecen de los elementos indispensables para fijar con claridad la naturaleza del producto vendido y, por tanto, lo que corresponde pagar por él.