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Lunes 1 de Julio de 2024

Primer Congreso: a 213 años de la inédita manifestación de autonomía y representación

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El 4 de julio de 1811 sesionó la primera instancia colegiada y colectiva de representación territorial del país. Fueron 41 diputados electos, que representaban a estas 25 partidas en que estaba subdividido administrativamente.

Senado pintura primer Congreso 4 de julio 1811
Pintura Primer Congreso Nacional de González Méndez y Larroche

El 4 de julio de 1811, marcó el inicio de la historia legislativa del país. Ese día se reunieron los primeros diputados electos en el palacio de la Real Audiencia, para dar comienzo a las sesiones de uno de los primeros parlamentos de América Latina.

Así se inició un largo recorrido legislativo para llegar al actual Congreso bicameral, tal como se conoce actualmente.

La conformación de este primer cuerpo legislativo fue clave para iniciar el proceso emancipador del país, así lo considera David Vásquez, historiador de la BCN “es una primera manifestación de autonomía, de representación territorial de bandos políticos que tenían distintas miradas sobre el proceso que estaba ocurriendo”.

“Fue una instancia colegiada, colectiva de representación territorial. Fueron 41 diputados los que fueron electos, que representaban a estas 25 partidas en que estaba subdividida administrativamente el país (por el norte Copiapó y por el sur Osorno) … Era bastante equilibrado en términos de correlaciones políticas … quienes ejercieron el cargo de presidente de este primer Congreso de los diputados eran más bien de una tendencia moderada”.

Vásquez comentó que se observa claramente “una intención de avanzar hacia cambios efectivos en la situación política, la independencia, y aquí la llegada de José Miguel Carrera fue fundamental porque viene a presionar este Congreso para que avance hacia posturas emancipadoras”.

Senado Congreso Nacional hacia fines del siglo XIX
Congreso Nacional hacia fines del siglo XIX
CONGRESO DE LOS MÁS ANTIGUOS

 

David Vásquez aseguró que “el Congreso chileno es uno de los más antiguos, podríamos decir que, en orden cronológico: el más antiguo es el parlamento británico cuyos sus orígenes están en el siglo XVII, luego el congreso de la revolución francesa y el chileno es el cuarto más antiguo a nivel mundial.

Durante los meses de diciembre de 1810 hasta marzo de 1811 se llevaron a cabo las elecciones en las diferentes partidas del país, este fue “el primer evento electoral que significó tener ciertas responsabilidades, instituciones a cargo de los registros, de que los datos fueran correctos”, agregó el historiador

“41 diputados electos y también se eligieron 41 diputados suplentes, en caso de muerte, retiro, etc. No se conocen todos los nombres porque durante el periodo de la reconquista española mucha documentación de este primer congreso, se destruyó o desapareció”. Pero destacan algunos de sus integrantes, tales como, Bernardo O´Higgins, Manuel de Salas, Agustín Eyzaguirre, entre otros.

El historiador añadió que “los primeros diputados electos debían ser respetables, ser reconocidos, que generaran confianza en su comunidad y que tuvieran recursos… era un cargo ad honorem”. 

Por lo tanto, los representantes eran de la elite militar, política, terratenientes porque había que saber leer y escribir, había que tener ciertas nociones, formación y educación y también cierto patrimonio”.

Ese 4 de julio, la ciudad de Santiago inició sus preparativos desde muy temprano, tal como lo establecieron los protocolos emanados de la primera Junta de Gobierno. “Esa primera sesión fue muy formal, llena de ritos. Los cuerpos militares se desplegaron alrededor de la Plaza de Armas para resguardar la ceremonia ante posibles disturbios”.

Los criollos se reunieron en una misa solemne en la Catedral, donde los diputados electos rindieron juramento ante la Iglesia. En esta ceremonia religiosa fue fray Camilo Henríquez, también elegido diputado propietario, el encargado de dar el sermón de inspiración patriótica:

“Los principios de la religión católica, relativos a la política, autorizan al Congreso Nacional de Chile para formarse una constitución … ¡Legisladores! Enterneceos; mirad con compasión la suerte de los pueblos cuyos destinos están en vuestras manos”.

Terminada la ceremonia, fue momento de retornar al Palacio para inaugurar las sesiones legislativas. Como representante de la Junta de Gobierno, Juan Martínez de Rozas, se dirigió a los parlamentarios motivándoles a través de su discurso:

“Representantes de Chile: esta es nuestra tarea ¿la llenareis? Sí, porque os conduce la sinceridad, el interés, la rectitud, la firmeza y el amor a la patria”.

Cabe recordar que este hito histórico se encuentra representado en la testera de la Sala de Sesiones del Senado en el Congreso en Santiago.

En dicho cuadro que adorna el salón, también se visualiza al diputado propietario Juan Antonio Ovalle, en su rol accidental de presidente del parlamento, en razón de ser el de mayor edad. En su discurso llamó a:

“Cumplir lo prometido, procuraremos ejecutarlo … es una obligación moral, lícita, i honesta, i necesaria, mayor aun que la de los propios bienes, porque no puede renunciarse la defensa de su propia vida, ni la de los demás conciudadanos ligados con el mismo pacto”.

El primer Congreso Nacional fue un punto de inicio, fue “un momento originario de la institucionalidad legislativa en el país con saltos, con altos y bajos, que fue clausurado en varias oportunidades a lo largo de su histórica, pero que ha tenido una continuidad que hace merecedora de 213 años de historia”.

“Fue una instancia colegiada, colectiva de representación territorial. Fueron 41 diputados los que fueron electos, que representaban a estas 25 partidas en que estaba subdividida administrativamente el país"

David Vásquez, historiador de la BCN

Fueron 55 las sesiones realizadas entre el 4 de julio hasta el 2 de diciembre de 1811, hasta que José Miguel Carrera disolvió el Congreso. A pesar de su corta duración, dentro de ese periodo los parlamentarios aprobaron una serie de leyes para Chile.

Entre ellas se cuenta la libertad de vientres, convirtiéndose en una de las primeras leyes para abolir la esclavitud en el país. Esta ley, permitió que los hijos nacidos de esclavos en Chile nacieran libres, siendo un hito para poner fin a la esclavitud.

Crearon la ley de cementerios para terminar con los entierros en las iglesias o en sus alrededores, de modo de disminuir la propagación de enfermedades.

Otras de las reformas fueron la abolición de los derechos parroquiales y al sistema de educación pública. Además, se dictó la ley de libertad de prensa.