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Estamos realizando esfuerzos por cubrir los ámbitos de la salud

Por Mariano Ruiz-Esquide, senador por la Región del Biobío

15 de noviembre de 2013

Imagen foto_00000002En primer lugar, es pertinente señalar que todos somos conscientes de que uno de los temas que se ha presentado con más fuerza en el país es el relativo a la salud, específicamente enfocado a cómo resolver y mejorar la condición de la salud pública en Chile.

 

Como se sabe, nuestro país tiene un sistema dual que, desgraciadamente, no siempre corre en paralelo y en el que no se producen los intercambios que se requieren. Para ello, debemos introducir mejorías.

 

El proyecto que recientemente despachamos, referido a los incentivos remuneracionales a favor de los profesionales de los servicios de salud, persigue como objetivo central corregir los aspectos que son esencialmente malos para la administración pública.

 

Sin embargo, quisiera hacer presentes algunas observaciones puntuales. Primero, no cabe ninguna duda de que uno de los grandes déficits que tiene el sistema público de salud es la mala distribución de los médicos. La concentración de especialistas, médicos generales u otros de cualquier naturaleza en el centro del país, fundamentalmente en la zona oriente de la Capital, lo que limita la posibilidad de un buen funcionamiento en los servicios de salud de las demás regiones y, a su vez, recarga absoluta e innecesariamente la situación de los hospitales de Santiago.

 

En segundo lugar, en la iniciativa se aprecia una secuencia con relación a algo que se resolvió en los primeros años del gobierno de la Concertación, relacionado con los médicos de la asistencia pública. Se produjo ahí lo que ha mencionado el Ejecutivo, a través del Ministro de Salud, en orden a que determinados médicos, después de 20 años en el sistema de turnos, dejaban de ejercer la profesión en los centros de atención pública o en los servicios de urgencia. Pero tenían la ventaja de poder hacerlo en horario diurno.

 

Señalo esto porque en aquella oportunidad me correspondió analizar el proyecto pertinente, que fue aprobado y se convirtió en ley, y en el que se estableció la posibilidad de otorgar a esos profesionales la facultad de hacer docencia universitaria en los hospitales donde no la había, y sigue sin haberla.

 

Por último, deseo manifestar que este proyecto -que está ad portas de convertirse en ley- nos permitirá sacar adelante esta materia y adelantar lo más rápidamente posible la solución de los problemas pendientes. Ya habrá tiempo después para formular algunas observaciones sobre el particular.

 

Además, quiero recordar que durante la misma sesión tratamos un proyecto relativo a las isapres. Ello significa que el Senado está realizando un esfuerzo por cubrir en forma paralela todos los aspectos que dicen relación con la salud, con el objeto de evitar que se produzca un avance exagerado en un área que presenta dificultades, en desmedro de otras que siguen siendo deficitarias.

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