Hasta que no sean instituciones sin fines de lucro ATEs no podrán funcionar pero mantendrán su historial

El Senado despachó a tercer trámite el mensaje –que posee discusión inmediata- que modifica la ley N° 20.248, que establece una subvención escolar preferencial, para facilitar la transformación de las entidades pedagógicas y técnicas de apoyo a personas jurídicas sin fines de lucro.

La iniciativa se aprobó por unanimidad en general (38 votos a favor), lo que fue destacado por los legisladores, quienes manifestaron que durante la Comisión de Educación y Cultura se llegó a acuerdo para mantener el fin al lucro.

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Esto, porque no se amplió el tiempo para que las ATEs siguieran funcionando mientras se transformaban en instituciones sin fines de lucro, plazo que finalizó el 8 de junio de este año, sino que el proceso lo pueden hacer sin funcionar y una vez concluido el trámite entrar al registro. Todo esto, sin perder su historial (curriculum), aspecto que también entrababa la tramitación. Es decir, “se cierra la puerta al lucro”, destacó la senadora Yasna Provoste, primera en hacer uso de la palabra.

La legisladora destacó, además, la disposición del Ministerio y de la Comisión, “quienes de forma unánime hemos aprobado este proyecto (…). Hemos sido capaces de converger en una posición que pone el foco en la calidad de la educación”.

Durante el debate, además, se valoró que aquellas entidades pedagógicas y técnicas de apoyo que obtengan dos evaluaciones deficientes de manera consecutiva en los procesos de certificación serán eliminadas del registro.

El proyecto tiene por objeto resolver el vacío existente en la actual ley de inclusión escolar, en la que no se contemplan los mecanismos legales necesarios para que las Entidades Pedagógicas y Técnicas de Apoyo (ATEs) puedan dar cumplimiento a la nueva obligación de transformarse en personas jurídicas sin fines de lucro, como asimismo, evitar la pérdida de continuidad en el Registro Público de Personas o Entidades Pedagógicas y Técnicas de Apoyo, lo que se traduciría en una pérdida de los antecedentes que validan la experiencia de éstas en el área educativa.

Luego, el senador Carlos Bianchi destacó que se destrabó una de las principales consecuencias del cambio para las ATEs en el antiguo proyecto, “al constituir la nueva entidad sin fines de lucro perdían su continuidad y como consecuencia perdían su historial de asesoría y antecedente de servicios, lo que les permite validar su categoría”.

Asimismo, el senador Álvaro Elizalde coincidió con este punto y destacó que el Ejecutivo se allanara al cambio. En otro orden, el senador Juan Pablo Letelier hizo presente un tema “de carácter doméstico, que por trabas de los recursos SEP, no se pueden comprar estufas, ni gas en escuelas”.

En tanto, los senadores José García Ruminot y José Durana indicaron que el proyecto tiene un importante sentido de justicia. “Pero además restituye que las personas naturales puedan inscribirse como personas técnicas para entregar esta capacitación (…) sin necesidad de tener que conformar una sociedad”. En otro orden subrayaron “que resulta imperioso mantener actualizados los registros y antecedentes para cumplir con los estándares de calidad”.

“El que no exista lucro nos parece coherente”, enfatizó el senador Jaime Quintana. “Es bueno entender el contexto. Se ha buscado ser más rigurosos en la calidad y que los directores tengan a la mano quienes lo han hecho bien y quienes lo han hecho mal”.

Para el senador Alejandro Navarro “la clave está en que las ATEs tengan calidad certificada y mejorar la calidad de la educación en los colegios. Hubo un plazo prudente para su cambio”.

Los senadores Ena Von Baer y Juan Antonio Coloma, declararon que el “historial de las asesorías es relevante para validar la experiencia y calidad del trabajo de las ATEs. (…) Y es verdad que al 8 de junio de este año debían ser sin fines de lucro, pero un 90% no cumplió por falta de procedimientos legales y por la pérdida de información que está en el registro, esto era tremendamente relevante”.

Luego, se realizó una votación separada en donde la senadora Provoste esperaba que las personas naturales “tuvieran derechos laborales consagrados por los establecimientos educacionales”; a su juicio, “abrir la posibilidad a partir de las ATEs es precarizar”

Sin embargo, esto fue refutado por los senadora Von Baer y García Ruminot, quienes manifestaron que muchas veces son profesionales que trabajan en más de un colegio y deben someterse a evaluación para validarse. 

En tanto, a juicio del senador Quintana opinó que, “despejado el tema del lucro, esta es una materia de diseño educativo” y el senador Kenneth Pugh “este es un tema humano, son los talentos que reciben las personas”.

Finalmente, la norma quedó tal cual está en el proyecto, pudiendo las personas naturales formar ATEs, alcanzando 16 votos a favor y 9 abstenciones.