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La fortaleza del Gobierno

Por Kenneth Pugh, senador por la Región de Valparaíso

16 de marzo de 2018

Imagen foto_00000014En el palacio del Cerro Castillo con vista al Océano Pacífico, por donde se transporta el 94% del comercio exterior chileno, el Ejecutivo invitó a sus ministros, subsecretarios y parlamentarios de gobierno a la primera reunión de la coalición que tendrá la importante responsabilidad de dirigir los destinos de Chile.

 

Esta primera reunión permitió que el gran equipo de trabajo que lo apoyará se conociera, donde los con mayor trayectoria política y legislativa fueron introduciendo a los más nuevos que se han incorporado recientemente. En un ambiente de franca camaradería y amistad se comenzó a desarrollar esa cultura organizacional tan necesaria, para emprender los grandes desafíos que conlleva gobernar. Gobernar es muy difícil y eso lo sabe muy bien el Presidente, por lo que la coordinación de los equipos y los niveles de trabajo es fundamental.

 

El programa de gobierno, las agendas, los flujos de información y el ritmo de trabajo que se establece es el que garantiza los buenos resultados, siendo fundamental  la coordinación política y legislativa, y el control del cumplimiento de los objetivos planteados. La experiencia del gobierno anterior ha permitido precisamente fortalecer estos aspectos, para desarrollar entre todos el “arte de lo posible”.

 

Hoy la palabra que resume el sentir de todos es “empatía”, no solo con los pares sino también con la ciudadanía que demanda solución a los problemas más graves que se enfrentan, como los de la infancia vulnerable, la delincuencia, el desarrollo económico que permita más empleo y mejores salarios, la Araucanía, la salud, pensiones y tantos otros. Ha nacido una nueva cultura de coalición de una derecha amplia y social, comprometidos todos con una causa común, que pondrá el énfasis en hacer las cosas bien y también en comunicar bien lo que se hace.

 

Ha asumido un nuevo “capitán” que llevará esta nave, que es Chile, y sus ciudadanos a buen puerto. Él sabe perfectamente el destino a alcanzar, por lo que todos los vientos le son favorables. Deberá como es usual enfrentar temporales y navegar rutas peligrosas, pero tiene un excelente equipo que lo acompaña, que ha estado con él en navegaciones anteriores y que tiene experiencia; y ha sumado una nueva tripulación más joven que viene con nuevo bríos y que permitirá lo más valioso: mantener la cohesión dentro de la diversidad del sector.

 

 

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