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Los Poderes del Estado saben perfectamente cómo cumplir sus respectivos roles

Por Jorge Pizarro, Presidente del Senado

20 de diciembre de 2013

Imagen foto_00000019En Chile, las instituciones funcionan y lo hacen con estricto apego a la Constitución y las leyes, con respeto a la investidura de las entidades republicanas, y con responsabilidad y seriedad. Este es uno de nuestros activos más relevantes y que nos ha permitido tener una reputación internacional como país serio y respetado.

 

Por lo mismo, las autoridades y representantes de los Poderes del Estado saben perfectamente cómo cumplir sus respectivos roles y tareas que la misma institucionalidad nos demanda. Las declaraciones que hiciera hace unos días el Presidente de la República en orden a demandar que se apruebe su agenda legislativa de fines de su gobierno, no sólo es extemporáneo, sino que se aparta de lo que conocemos como respeto y rigurosidad en el cumplimiento de las tareas que la ley nos manda.

 

El Congreso debe ejercer su función colegisladora siempre y el Presidente debe gobernar hasta al último día de su mandato; nadie puede pretender entonces que el Parlamento se inhiba de sus funciones y actúe como mero depositario de órdenes emanadas desde otro Poder del Estado.

 

La pretensión del Mandatario de que se apruebe casi sin discusión su postrera agenda legislativa es derechamente inaceptable. Más aún cuando su gobierno ha sido reprobado de manera inmediata en apenas un periodo presidencial y la ciudadanía ha dado un apoyo abrumador a la candidatura de la oposición por sobre la candidatura de continuidad.

 

El gobierno no puede pretender que el Congreso le apruebe todo lo que quiera más aún en un tono que linda en lo poco respetuoso. El Congreso sí va a cumplir su deber y ese deber es legislar con calidad y responsabilidad para el país.

 

Nos pusimos de acuerdo con el Ministro de la SEGPRES en un trabajo legislativo en materias de gran interés nacional e institucional como asuntos de transparencia, regulación del lobby y probidad, lo mismo que en el proyecto de ley sobre fármacos en donde hay acuerdo, así como otras materias como derechos humanos, energía y gestión de emergencias.

 

Hay temas en los que no hay acuerdo y que sencillamente el Congreso va a ejercer su función al rechazar ideas que son malas o que no responden a la mayoría que hoy existe en el Senado y la Cámara de Diputados. Esa mayoría será aún más relevante a contar del nuevo periodo parlamentario, por lo que es importante que el Ejecutivo aprenda a leer estas señales políticas y tenga una buena aproximación hacia el poder colegislativo, que juega un papel muy importante en el desarrollo que el país necesita.

 

Así es la democracia y así debe seguir siendo, con perfeccionamientos, pero con profundo respeto por la institucionalidad.

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