Cerca de 10 mil personas podrían usar brazalete electrónico cuando el sistema esté operativo

Alrededor de 10 mil personas podrían utilizar el brazalete electrónico, cuando empiece a regir por completo el proyecto que modifica la ley sobre medidas alternativas a las penas privativas o restrictivas de libertad, que entre otras medidas permite el uso de medios de control telemáticos para los condenados por delitos menores y que tengan la condición de primerizos.

Así lo informó el senador Hernán Larraín, integrante de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado, que está analizando detalladamente el articulado de la iniciativa que cumple su segundo trámite.

"En estado de régimen, estamos hablando de que se va a llegar a unas 10 mil personas con brazalete y eso implica tener mucha información y cuando uno tienen a una persona con brazalete que ha cometido delitos sexuales menores o violencia intrafamiliar y se acerca a un lugar donde está la víctima,  ahí hay que tener un sistema de control preventivo que alerte a Carabineros para que pueda actuar y evitar que la persona vuela a delinquir", explicó.

Del mismo modo, señaló que el sistema que se está tratando de regular "es complejo, pero muy moderno y puede ayudar enormemente, pero hay que hacerlo con cuidado y acotado para que efectivamente pueda ser controlado debidamente y rinda sus frutos".

El senador Larraín precisó que el mecanismo busca controlar el cumplimiento de la libertad vigilada y por lo mismo, hay que tener especial precaución para que cuando se utilice la información sea realmente útil.

"Hay países donde por abusar del sistema de monitoreo esto ha sido dejado de lado porque no hay cómo controlar toda la información que llega y hacerla útil a tiempo, y circunscribir eso nos está tomando algún tiempo pero nos parece mejor prevenir que el uso de este control ayude efectivamente a que se cumplan las penas sustitutivas de libertad y que las personas puedan reinsertarse con mayor rapidez de nuevo a la sociedad".

ROL PREVENTIVO

En tal sentido, el parlamentario señaló que esta medida apunta a que un grupo de personas -primerizos que no hayan cometido delitos graves- puedan salir antes de la cárcel y de ese modo evitar el contacto criminógeno.

"Estamos tratando de que un grupo de personas pueda cumplir sus penas de manera distinta, controlada y que por ello puedan favorecer rápidamente su reinserción y rehabilitación, porque no siempre esto se puede hacer en las cárceles. Esto supone un sistema que amplía el número de delegados que va a hacer un seguimiento y en muchos casos con un tratamiento según la naturaleza del caso", explicó.

El senador Larraín señaló que en las últimas sesiones de la Comisión de Constitución se ha ido analizando pormenorizadamente todos los casos de penas sustitutivas.

"Aquí se está dando un paso muy significativo en la forma en cómo se sigue, a través de mecanismos nuevos, el cumplimiento alternativo. Aquí no hay solo la necesidad de racionalizar el uso de la cárcel sino que también de poder reinsertar socialmente a las personas que están condenadas y para eso estas penas sustitutivas significan que generan un sistema de seguimiento muy complejo". Puntualizó.