Nombramiento de dos senadores en gabinete ministerial genera diversas opiniones

La incorporación al gabinete ministerial de los senadores Andrés Chadwick y Pablo Longueira generó numerosas reacciones entre sus pares y puso una vez, en el tapete el tema del sistema de reemplazo que contempla la Constitución para los legisladores que cesan en sus cargos.

Cabe hacer notar que solo una vez que se publique en el Diario Oficial, el decreto que nombra como Ministros de Estado a los senadores Andrés Chadwick y Pablo Longueira -lo que ocurrirá después que el Contralor tome razón de la nominación- la Cámara Alta procederá a llenar las vacantes dejadas, según el procedimiento que establece la Constitución (artículo 51) y donde son los partidos políticos los que nominan a sus reemplazantes. En este caso, la Unión Demócrata Independiente.

A juicio del senador José Antonio Gómez, "este cambio de gabinete significa que la ciudadanía no tiene posibilidades frente a los que eligió como sus senadores y lo más grave es que si de esta situación se designa a un ex ministro para ir al Senado, estamos ante la transformación hacia un sistema parlamentario, asunto que no permiten las normas  constitucionales". Agregó que "eran necesarias la transformación de las relaciones políticas y las formas de relacionarse entre el parlamento y el gobierno, pero con este cambio como las sillas musicales no se vislumbra nada de esto".

En tanto, el senador Carlos Larraín quien fuera designado para ocupar el cargo que en su minuto dejó el ex senador Andrés Allamand tras ser nombrado como Ministro de Defensa, desestimó las críticas de la oposición que califica como "silla musical" las modificaciones introducidas al gabinete y aseguró que "yo habría pensado que la Concertación iba a cambiar de línea". Aseveró que "no todo puede ser ácido, así que yo al menos me declaro muy contento con el cambio y tengo la esperanza de que se pueda trabajar precisamente con la oposición", manifestó.

A su vez, el senador Ignacio Walker, consideró que "este es el gabinete del enroque. Cuesta creer que 4 de los 8 ministros del  nuevo gabinete ya estaban en el gobierno y seguirán estando en el gabinete, este es lo más parecido al enroque, con todo lo que ellos mismos habían criticado las "sillas musicales". Agregó que también "llama la atención que 2 de los 3 ministros políticos sigan en sus puestos a pesar de que resulta evidente que ha existido una seria falla de conducción política". Expresó que "además dos senadores dejan sus cargos de representación popular, completando 4 senadores en 7 meses, lo que significa que aumentan a 4 los senadores designados".

Por su parte, el senador Juan Antonio Coloma aseveró que "hemos hecho un esfuerzo grande por poner todo a disposición de un buen gobierno. Creo que este Gobierno es muy exitoso en materia económica, mucho más empleo, más crecimiento, más inversión, creo que había que corregir algunos temas en otros ámbitos, y nosotros hemos puesto a disposición a personas que tienen una gran experiencia". Desestimó que se esté perdiendo fuerza en el Senado al ceder a dos de los nombres con más experiencia en el gremialismo, subrayando que la apuesta de la UDI es "pensar en grande" para que al Presidente Sebastián Piñera le vaya lo mejor posible.

Una opinión diametralmente distinta expresó el senador Carlos Bianchi quien calificó "como un daño a la democracia", el nombramiento de dos senadores. "Para mí la preocupación va de la mano con el tener ahora en el congreso 4 senadores designados. Esta es una estafa electoral, porque la gente fue engañada". No obstante indicó que ésta es una vieja práctica: "sacar parlamentarios no es nada nuevo, lo hizo la Concertación y hoy lo hace la Alianza, pero quienes somos independientes, quienes somos respetuosos del ejercicio democrático que tiene el ciudadano, podemos decir basta con este abuso de los partidos políticos".

El senador Jaime Quintana, quien preside la Comisión de Educación, señaló que espera "que el nuevo ministro del ramo no venga como el gendarme del movimiento estudiantil, sino con una agenda clara donde el gobierno se defina sobre el lucro", agregando que "la salida de Lavín de Educación ratifica que estaba completamente solo desde hace tiempo". Añadió que "Felipe Bulnes se ha caracterizado por tener un diálogo fluido con la oposición y ahora depende de él seguir manteniéndolo".

Por su parte, el senador Hernán Larraín manifestó  que "el Presidente Piñera ha escuchado a la gente,  las voces que vienen del  Congreso, de los partidos políticos, tanto del Gobierno como de la Oposición, y entiendo que su cambio es también de un sistema de trabajo, y de la forma cómo se lleva a adelante la conducción política". Respecto de los nombres que ocuparán los cupos senatoriales dejados por Andrés Chadwick y Pablo Longueira, el senador señaló que "en la UDI vamos a iniciar un proceso de consulta en las respectivas circunscripciones de los senadores y luego a la Comisión Política, de modo de contar con esos antecedentes antes de tomar una decisión, que esperamos sea lo más rápida posible".

El senador Alejandro Navarro lamentó que "se intenten resolver los problemas del gobierno afectando la decisión soberana de miles de chilenos, con la nueva salida de senadores de la Alianza y generando con ello una vuelta a la ya superada institución de los senadores designados". Sostuvo que "no podemos hacernos demasiadas expectativas con los cambios y los enroques, tenemos la certeza de que los cambios no significan borrón y cuenta nueva, de manera que los ministros salientes no quedan exentos de los procesos fiscalización y de exigencia de cambio ya en marcha respecto de algunas carteras".

A su turno, el senador Andrés Zaldívar aclaró que hay que visualizar lo que pase en el próximo tiempo porque hasta ahora lo que ha habido es más "una transaca política para darle a la UDI un espacio que estaba reclamando en base a no sacar al Ministro del Interior". Puntualizó que el cambio de gabinete demuestra que hubo "mucha pobreza para resolver los problemas, porque no puede ser que siga sacando senadores del Parlamento".

Finalmente, los senadores Fulvio Rossi y Ricardo Lagos Weber se sumaron a las críticas por el cambio de gabinete y expresaron sus reparos a los nombramientos y enroques. El senador Rossi dijo que "el Presidente Sebastián Piñera está incurriendo en un grave error para la democracia chilena, desmantelando el Senado y reinstalando la institución de los senadores designados". A su vez, el senador Ricardo Lagos Weber advirtió que "sería una pésima señal de la derecha chilena que le otorgue premios de consuelo a ministros que ha tenido mal desempeño, como en el caso de la ex vocera Ena Von Baer".