Nombramiento de nuevo integrante de la Corte Suprema quedó pendiente
La Presidencia del Senado y los comités parlamentarios fijarán nueva fecha para que la Sala se pronuncie sobre la propuesta que envió la ex Presidenta Michelle Bachelet a la Cámara Alta.
4 de mayo de 2010
Por "consideraciones que van más allá del nombramiento del ministro que se propone", el jefe del comité de senadores de la UDI, Hernán Larraín, solicitó una segunda discusión del oficio enviado por la ex Presidenta de la República, Michelle Bachelet, que propone nominar como nuevo integrante de la Corte Suprema al abogado Mauricio Jacob Chocair.
Según explicó el parlamentario, la solicitud, que en la práctica significa postergar la votación, se debe a consideraciones que "están más allá de la discusión misma que se tiene que producir o del nombramiento del ministro que se propone por parte del Ejecutivo para ocupar una vacante de la Corte Suprema".
El legislador agregó que "no es un problema que tiene que ver con la decisión en sí misma, sino que con la necesidad de tener algún tiempo para tener oportunidad de poder discutir criterios en ámbitos de nombramientos, incluso más allá de este que estamos viendo hoy día".
El senador Larraín hizo expresa mención "por el respeto que nos merece el abogado Jacob Chocair e insistió en que "la inquietud de fondo que no tiene que ver con la persona ni con la decisión, sino que un tema más complejo y necesitamos más de un día para poder zanjarlo".
Por su parte, el senador Sabag dijo entender el derecho de pedir una segunda discusión, pero solicitó que se fijara una fecha a la brevedad.
En tal sentido, el Presidente del Senado Jorge Pizarro señaló que se encargará de establecer una fecha junto a los comités parlamentarios.
Cabe recordar que el abogado Mauricio Jacob Chocair, fue propuesto para integrar el máximo tribunal por la ex Mandataria Michelle Bachelet, para llenar la vacante provocada por el cese de funciones de Orlando Álvarez Hernández. Para ser ratificado en ese cargo, el profesional requiere del voto favorable de los dos tercios de los senadores en ejercicio, es decir 25 sufragios.
Este nombramiento se hace en virtud de la disposición constitucional, que prevé que cinco de los veintiún ministros del máximo tribunal deberán ser abogados extraños a la administración de justicia, tener a lo menos quince años de título, haberse destacado en la actividad profesional o universitaria, y cumplir los demás requisitos que señale la ley orgánica constitucional respectiva, que en este caso es el Código Orgánico de Tribunales.