Nueva legislación sobre Violencia en los Estadios fue aprobada de manera contundente por la Cámara Alta

Un amplio respaldo encontró en la Sala del Senado el proyecto que modifica la Ley de Violencia en los Estadios, que busca prevenir y sancionar hechos de violencia en recintos deportivos con ocasión de espectáculos de fútbol profesional. Ahora corresponde que la iniciativa sea analizada por la Cámara de Diputados y si ésta aprueba los cambios que le hizo el Senado, quedaría en condiciones de ser promulgada como ley.

Durante la discusión y votación del proyecto intervinieron los senadores Hernán Larraín, Eugenio Tuma, Alberto Espina, Patricio Walker, Jorge Pizarro, Baldo Prokurica, Eduardo Frei y José Antonio Gómez, además del Ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter. (Vea la sesión por TV Senado)

En lo fundamental, la iniciativa impone un conjunto de exigencias que deberán cumplir los organizadores de espectáculos de fútbol profesional en los estadios, las que fueron aprobadas con 28 votos a favor.

Entre ellas, designar un jefe de seguridad; contratar guardias de seguridad privados; instalar sistemas tecnológicos como cámaras de seguridad o detectores de metales; establecer zonas separadas y claramente delimitadas en los estadios, en que se ubicarán los hinchas o simpatizantes y el público general; contar con sistemas de control de acceso e identidad de los espectadores; y disponer de medios de grabación de imágenes, dentro y fuera del recinto deportivo que faciliten la identificación de las personas.

Del mismo modo y de acuerdo al riesgo asociado a determinados espectáculos de fútbol profesional, el intendente podrá pedir a los organizadores que contraten seguros o constituyan cauciones para garantizar la reparación de los daños que se causen a los bienes públicos o privados, ubicados en el recinto deportivo o en sus inmediaciones.

En tanto, con 11 votos a favor y 7 en contra, la Sala del Senado aprobó una norma que señala que si un espectáculo de fútbol profesional implica un riesgo para el orden público o la seguridad de las personas o los bienes, el Intendente comunicará este hecho al Fiscal Regional del Ministerio Público, quien deberá ordenar la presencia de, a lo menos, un fiscal. Las discrepancias en torno a esta disposición decían relación con si acaso se afectaba o no la autonomía del Ministerio Público.

Por su parte, con 13 votos a favor, 1 en contra y 3 abstenciones se corroboró el criterio de que las "inmediaciones" de un estadio comprenderá la distancia de mil metros perimetrales, medidos desde los límites exteriores del recinto deportivo.  La votación separada de este artículo fue solicitada por el senador Tuma quien manifestó establecer esa distancia en regiones podría implicar una paralización de gran parte de algunas ciudades.

Asimismo, con 17 votos a favor y 1 abstención, la Sala del Senado acordó eliminar el concepto de "barras" de la legislación vigente, pues se considera que es esencial no aceptar la existencia legal de grupos organizados que muchas veces son los principales responsables de los hechos de violencia en los estadios.

El proyecto considera un plazo de 18 meses, contados desde la publicación de la ley, para que los estadios puedan adaptarse a las nuevas exigencias.

ALCANCES DEL DEBATE

El senador Larraín, quien explicó los principales alcances del proyecto, valoró el trabajo realizado por la Comisión de Constitución en conjunto con el Ejecutivo y señaló que el objetivo es buscar el debido resguardo a todos los que concurren a espectáculos de fútbol profesional. Destacó que se tipifiquen las faltas que se pueden cometer en estadios, argumentando que se busca reprimir conductas menos graves pero más generalizadas como el porte de bengalas o petardos, e interrumpir partidos. Además relevó que se establezcan sanciones anexas como la expulsión inmediata y la prohibición de asistir a espectáculos de futbol profesional entre un año o a perpetuidad, dependiendo de la gravedad del hecho.

En tanto, el senador Espina manifestó que con esta iniciativa se favorece a las miles de familias que van a los estadios y que experimentaban "un infierno" producto de los actos de violencia. En tal sentido, destacó las exigencias que se establecen para los organizadores, las responsabilidades que se entregan a los clubes y la prohibición que se les impone de entregar cualquier aporte económico a hinchas.

El senador Patricio Walker manifestó que el propósito del proyecto es que la gente y la familia vuelvan a los espectáculos de fútbol y señaló que es partidario de que se establezca con claridad lo que se entenderá por inmediaciones de los estadios, pues muchos delitos se cometen alrededor de los recintos deportivos y quedan impunes. Del mismo modo, destacó que se prohíba a los clubes financiar a los hinchas y se mostró a favor de que se establezcan multas de 100 a 300 UTM para los clubes que, por negligencia o descuido culpable, contribuyeran o facilitaren la comisión de hechos violentos.

En tanto, el senador Pizarro valoró los cambios que se le hicieron a la iniciativa, pero planteó su inquietud respecto de los efectos que pueda tener en las ciudades más pequeñas, establecer una serie de exigencias para las inmediaciones de los estadios, independiente de la peligrosidad que pueda tener un partido. En tal sentido, propuso una corrección al texto que fue acogida por la Sala.

RESPONSABILIDADES

Por su parte, el senador Prokurica destacó el trabajo que realizó en conjunto la Comisión de Constitución del Senado junto al Ejecutivo  y dijo que es una buena medida involucrar a los organizadores en el control de la hinchada y establecer seguros para cubrir los daños que se puedan ocasionar tanto en bienes públicos como privados, que fue planteado por él durante el trámite de la iniciativa.

El senador Frei en tanto manifestó que no habrá solución al problema de la violencia en los estadios, si los clubes profesionales no tienen responsabilidad. Señaló que en países desarrollados los estadios no están custodiados por policías porque son los clubes los responsables y en tal sentido, dijo que para que esta ley no sea letra muerta, se necesita el compromiso de la Asociación del Fútbol Profesional y la participación de los clubes.

El senador Gómez destacó los alcances del proyecto, pero planteó sus inquietudes respecto de lo que considera una excesiva penalización y el efecto que ello podría tener para Gendarmería. Del mismo modo, considera que se debe resolver de mejor manera el tema de la presencia de Carabineros en los estadios, pues a su juicio, es importante que los clubes utilicen sus recursos y no los de todos los chilenos para resguardar la seguridad.

Uno de los aspectos en los que hubo votación dividida dice relación con la obligación de que un fiscal del Ministerio Público esté presente en los partidos de alto riesgo. En opinión de los senadores Larraín y Gómez  imponer dicha obligación va en contra del concepto de autonomía que tiene el Ministerio Público e impone una mayor carga a dicha entidad; mientras que el senador Espina considera que es fundamental que esté un fiscal presente para los efectos probatorios.