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  Rechazan reforma al sistema universitario anunciada por el Gobierno

  El senador Jaime Quintana advirtió que crear una entidad que agrupe a todas las universidades tradicionales y privadas y reformular el sistema de becas ¿podrían transformarse en el segundo gran proceso privatizador de las universidades¿.

22 de junio de 2010

Como una situación preocupante y que requiere del análisis en profundidad por parte de todos los actores del mundo de la educación superior, calificó el senador Jaime Quintana, la propuesta del Gobierno de crear una nueva institucionalidad que agrupe a los planteles tradicionales y privados.

Si bien el parlamentario reconoció que existen universidades estatales "que se están quedando muy atrás" y otras privadas que tienen rendimientos muy destacados "esta no es razón suficiente para ponerlas a todas, estatales y privadas bajo un mismo paraguas".

El legislador por la Araucanía y miembro de la Comisión de Educación del Senado fue enfático al sostener que no se puede dejar pasar los aspectos básicos que las diferencian, como son, en el caso de las universidades públicas, el rol estratégico de formación que le cabe en el campo de la investigación y sobre todo, en materia de acceso a las oportunidades a los sectores de menores ingresos.

Precisó que "a la luz de los antecedentes que han sido entregados por el jefe de la División de Educación Superior del Mineduc, Juan José Ugarte, se podría estar frente a un intento por privatizar aun más la educación superior".

"Eso es lo que uno observa en todos estos lineamientos, va a ser una posibilidad de abrir concursos a otros planteles donde se tienda a homologar el rol que le cabe a cada universidad y no hacer distinciones entre universidades tradicionales y privadas, eso es algo que preocupa porque significaría dar un giro a la educación superior bastante marcado", puntualizó.

Añadió que "de hecho uno podría pensar que estamos ante el segundo gran proceso privatizador de la educación desde que se crearon las universidades privadas en la década del 80".

El senador Quintana aseveró que en materia de financiamiento no se ve mucha claridad en la propuesta del Gobierno porque "no hay definición sobre el tema del aporte directo, que es el principal componente de las universidades tradicionales".

Aseguró que "por los lineamientos que entrega el nuevo jefe de la división de educación superior uno podría pensar que el aporte directo va a ser ahora una torta a repartir entre mas, sin que ella aumente de tamaño; esa es la preocupación".

En materia de beneficios a los estudiantes el parlamentario dijo que tampoco hay mucha claridad respecto de lo que va a pasar, por ejemplo con el fondo solidario.

No obstante, reconoció que hay un conjunto de becas que tal vez sea necesario revisar porque no están cumpliendo su objetivo, sin embargo "el crear un único sistema de becas y créditos que no haga diferenciación respecto de donde el alumno estudia, conduce a una situación muy preocupante, porque se puede dejar a alumnos con capacidad fuera de los beneficios".

"Surge entonces la duda, que es lo que se va privilegiar, el cómo se cobra o a quien se otorga un crédito, eso me parece que es muy importante despejarlo", concluyó el parlamentario.

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