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  Mantención del impuesto de timbres y estampillas para las grandes empresas genera debate entre senadores

  Mientras senadores de la Concertación aseguraron que esa fórmula permitiría cubrir en parte el déficit fiscal que generaría el proyecto para el financiamiento de la reconstrucción; sus pares de la Alianza precisaron que el piso de negociación es que el impuesto de timbres no se aumente ni a las pymes ni a las personas.

2 de junio de 2010

La posibilidad de abrir un ámbito de negociación en el proyecto sobre financiamiento de la reconstrucción, a través de la mantención del impuesto de timbres y estampillas solo para las grandes empresas, fue acogida con distintas visiones por senadores de la Concertación y la Alianza.

Mientras los senadores Camilo Escalona y Jaime Quintana valoraron la señal del Ejecutivo para flexibilizar la iniciativa que cumple su segundo trámite, la Cámara Alta; su par, el senador Hernán Larraín, recalcó que el piso de negociación es que el impuesto de timbres y estampillas no afecte ni a las pymes ni a las personas.

Cabe señalar que, la Comisión de Hacienda realizó una amplia ronda de audiencias públicas, donde escucharon las opiniones de los representantes de la Fundación Chile 21; del Instituto Igualdad, de la Compañía Chilena de Tabacos; de la Cámara Chilena de la Construcción; de la Red Chile Libre de Tabaco; de la Corporación Nacional de Laringectomizados (Conalach); de la Conupia y de la Conapyme; de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y de la Fundación Educación Popular en Salud.

El senador Camilo Escalona, presidente de la instancia señaló que "la postura de la Concertación es dialogar. Queremos alcanzar el propósito para el cual el proyecto se concibió, es decir,  contar con una cantidad de recursos para la reconstrucción".

Señaló que "de acuerdo con las cifras entregadas por el Ejecutivo, este proyecto tal como está  recauda 900 millones de dólares -que resultan luego de restar los 600 millones de dólares de la Ley Reservada del Cobre y los 300 millones de dólares de las normas de depreciación que fueron rechazadas en la Cámara-.  Sin embargo, se requieren 8.500 millones de dólares para la reconstrucción".

Por lo tanto, aseguró que "debemos hacer un esfuerzo para allegar los recursos necesarios y, si el gobierno asume una disposición de mejorar los ingresos, naturalmente, tendremos la mejor disposición", refiriéndose así a la posibilidad de mantener la tasa del impuesto de timbres y estampillas solo para las grandes empresas".

Explicó que "eso significaría tapar el hoyo,  porque la principal fuente de déficit presupuestario, a partir del 2013, se terminaría. Es decir, la recaudación por concepto del impuesto de timbres y estampilla a partir de 2013 generaría alrededor de 400 millones de dólares, con lo cual se resolvería nuestra principal objeción y se reequilibraría el proyecto".

ALZA DE IMPUESTOS PERMANENTE

Coincidió con su par, el senador Jaime Quintana quien valoró la apertura demostrada por un grupo de diputados de la Alianza quienes, en una reunión con el Presidente Sebastián Piñera, plantearon la posibilidad de dejar como permanente el impuesto de timbres y estampillas para las grandes empresas.

Sin embargo, argumentó que "la opción de mantener permanentemente este impuesto para las grandes empresas es positiva pero insuficiente, debido a las necesidades que tiene el país a consecuencia del terremoto del 27 de febrero".

Indicó que, "creemos que no es posible fijarse nuevas metas en torno al bicentenario, pretender alcanzar niveles de país desarrollado y al mismo tiempo reconstruir vastas zonas destruidas por el terremoto, todo ello con el mismo presupuesto", manifestó.

En este sentido, el parlamentario fue enfático al sostener que "sigue siendo indispensable como lo hemos planteado desde el interior de la Concertación, que el alza en los impuestos sea permanente, no así la invariabilidad o los beneficios tributarios".

SIN CASTIGOS PARA LAS PYMES

A su turno, el senador Hernán Larraín, al ser consultado sobre la petición de un grupo de diputados de modificar el impuesto de timbres y estampillas, sostuvo que "yo he participado en reuniones en el Comité Político y, en todas hay dos pisos que son inamovibles: uno el impuesto a las grandes empresas se aplica en forma transitoria, porque los gastos son transitorios y, segundo, que el impuesto de timbres y estampillas no se va aumentar ni a las pymes ni a las personas".

El legislador recalcó que "no queremos castigar aún más a estos sectores, por un capricho de la Concertación. Ése es nuestro piso y de ahí hay bastante unanimidad de mantenerlo a cualquier precio".

Precisó que "aumentar el impuesto de timbres y estampillas de 0,6% a 1,2% perjudica directamente a más de 600 mil pymes en Chile y a más 1.2 millones de personas naturales que sufrirían las consecuencias de acceder a créditos más caros o mayores intereses por repactar sus deudas".

Añadió que "si se puede buscar una fórmula que mantenga este principio estaremos disponibles para estudiarlas, pero no vamos a aceptar el planteamiento de la Concertación, porque seguimos la lógica de la ex Presidenta Bachelet, en el sentido de que en tiempos de crisis hay que buscar maneras de apoyar a las pymes y no de castigarlas como quieren ahora sus partidarios".

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