Click acá para ir directamente al contenido

  Proyecto que aumenta sanciones por conducir bajo efectos del alcohol quedó en condiciones de ser promulgado como Ley

  Con 30 votos a favor y 2 en contra, la Sala del Senado aprobó el informe de la Comisión Mixta que zanjó las diferencias entre ambas ramas del Congreso.

31 de enero de 2012

Listo para ser remitido al Presidente de la República para su firma y promulgación como ley, quedó el proyecto que aumenta las sanciones por manejo en estado de ebriedad, bajo la influencia de sustancias estupefacientes o sicotrópicas y bajo la influencia del alcohol. Ello, luego que el Senado aprobara con 30 votos a favor y dos en contra de los senadores Jaime Quintana y Eugenio Tuma, el informe que elaboró una Comisión Mixta de senadores y diputados para resolver las divergencias que surgieron durante la tramitación de la iniciativa.

 

Durante la votación intervinieron los senadores Jovino Novoa, Jorge Pizarro, Guido Girardi, Jaime Quintana, Juan Antonio Coloma, Eugenio Tuma, Ricardo Lagos y José Antonio Gómez.

 

En su calidad de presidente de la Comisión Mixta que analizó el tema, el senador Novoa explicó que las diferencias entre ambas Cámaras surgieron a raíz de algunos aspectos procedimentales que había incorporado el Senado y que estaban contenidos en un proyecto presentado por los senadores Carlos Cantero y José Antonio Gómez. Explicó que se llegó al acuerdo de separar los temas procedimentales de esta iniciativa y continuar su tramitación en marzo, para lo cual el Ejecutivo habría comprometido la urgencia respectiva. De esta forma, los temas de procedimientos y de aumento de sanciones penales quedaron pendientes para el análisis de dicho proyecto.

 

El senador Pizarro valoró la iniciativa presentada por los senadores Gómez y Cantero y manifestó que le parece positivo que esté el compromiso explícito del Ejecutivo de colocarle urgencia. No obstante, insistió en sus reparos a la baja de la graduación alcohólica a 0,3 miligramos del alcohol por litro de sangre, el piso para establecer que una persona está bajo la influencia del alcohol. En su opinión ello se puede prestar para una tergiversación ya que sin necesidad de consumir alcohol, sino que otros productos, podría aparecer dicha cifra en la alcoholemia. Agregó que si bien le parece adecuado fijar en 0,8 la cifra para establecer el manejo en estado de ebriedad, lo otro es exagerado.

 

En tanto, el senador Girardi valoró el análisis y tramitación que tuvo el proyecto en el Congreso y rechazó las acusaciones de algunos sectores que señalan que quienes apoyan esta iniciativa tienen una actitud "talibana". Por el contrario, dijo que quienes han promovido el proyecto, en ningún caso están por coartar los derechos de los que quieran consumir alcohol, sino que lo que se busca es evitar que aquellos que lo hacen, conduzcan un vehículo bajo sus efectos. Agregó que establecer en 0,3 miligramos por litro de alcohol en la sangre es una decisión correcta, pues está comprobado que con esa cantidad se produce un daño en la capacidad de alerta y respuesta.

 

PREVENCIÓN

Una opinión distinta manifestó el senador Quintana, quien lamentó que se estén propiciando proyectos con aspectos más bien punitivos que preventivos. Agregó que desde un principio se debió establecer una diferenciación entre la falta y el delito, pues a su juicio, la cifra de 0,3 es una exageración. El legislador señaló que si se quiere desincentivar el uso del alcohol, se debe fortalecer la prevención, al mismo tiempo que hacer algo respecto de la inmensa cantidad de patentes de alcoholes que hay en el país.

 

El senador Tuma coincidió en señalar que se están extremando las medidas punitivas e intentando cambiar la naturaleza de muchas personas que suelen consumir alimentos acompañados de una copa de alcohol. A su juicio, estas disposiciones son extremadamente duras y no se está actuando con suficiente criterio al aprobar algo tan exigente.

 

A su turno, el senador Coloma manifestó que si bien comparte lo planteado por el senador Quintana, el informe elaborado por la Comisión Mixta perfecciona varios aspectos de la iniciativa, por lo que es fundamental aprobarlo.

 

El senador Lagos manifestó que no hay que confundir el objetivo central, argumentando que si bien se debería contar con más campañas de prevención, publicidad, educación y fiscalización, esta iniciativa siembra conciencia respecto de las implicancias de conducir bajo los efectos del alcohol. Precisó que es fundamental tomar en consideración a los terceros que se ven perjudicados producto del manejo en estado de ebriedad.

 

Finalmente, el senador Gómez señaló que el proyecto tiene un objetivo importante y precisó que no se sube ninguna pena de cárcel, pues lo único que se baja es la graduación y se suben las sanciones respecto de las multas que se aplican y del retiro de la licencia de conducir, hasta de por vida, dependiendo de la gravedad de los daños causados.

 

El Ministro de Transportes Pedro Pablo Errázuriz agradeció la aprobación por parte del Congreso y señaló que junto a Senda y Conaset seguirán trabajando en el área de información y prevención.

 

 

Imprimir