Prioridad para Arica

La situación geopolítica de la Región de Arica- Parinacota debe tener la primera prioridad dentro de las políticas del Estado, por ello me reuní con el Ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, para analizar a fondo este tema.

La soberanía no solamente se ejerce a través de las Fuerzas Armadas, sino que, por sobre todo, se ejerce cuando hay políticas de población y cuando hay desarrollo económico. No obstante, estas dos premisas, no existen en la Región de Arica y Parinacota. Al revés, existe despoblamiento y, desde hace muchas décadas, un fuerte deterioro de carácter económico  con altos niveles de pobreza.

Si uno hace una secuencia histórica, podrá ver que estructuralmente siempre esta Región, desde hace más de una década, ha tenido un desempleo estructural de sobre dos dígitos, y el 30 por ciento del empleo lo genera, de alguna manera, la inversión pública. Pero aún así la cesantía es altamente superior a lo del resto del país.

Paralelamente, a partir del año 2000 empieza a decrecer la población y se calcula que de aquí al 2020 ven a existir 22 mil 500 personas menos viviendo en una Región geopolíticamente estratégica.

Por lo tanto, el Estado de Chile, desde mi punto de vista -y así se lo señalé al Ministro de Relaciones Exteriores y a todo su equipo-, debe tomar definiciones.

Y para hacerlo existen tres opciones de desarrollo. La primera, es permitir a esa Región que desarrolle sus propias potencialidades. La segunda es la existencia de beneficios tributarios que sean eficaces y la tercera opción es una mezcla de ambas. Lamentablemente, hasta ahora se han intentado sin resultados, esas tres opciones.

El desarrollo de la agricultura en la zona está estrechamente ligada al tema de los recursos hídricos pero hasta el momento ninguna obra significativa de riego se ha materializado. En la actualidad, las hectáreas cultivables son 4 mil 899, pero se podría llegar a las 10 mil hectáreas si se hubiesen implementado los pozos de La Concordia, los pozos del Altiplano, los embalses de Chironta, Livilcar y la planta desalinizadora

Algo similar ocurre con la Gran Minería que no se ha podido desarrollar, porque el 58,7 por ciento de la superficie de la Provincia de Parinacota corresponde a áreas protegidas. En total son 814 mil hectáreas de áreas protegidas en tres parques que tienen distinta naturaleza.

Por otro lado, en materia de turismo con identidad tampoco se ha podido avanzar porque no se ha desarrollado una infraestructura potente que permita posicionar a nivel mundial el hecho de que tenemos las momias más antiguas del mundo: 7 mil años, en Chinchorro.

Estamos en el peor de los escenarios en una zona geopolíticamente estratégica, porque el Estado, directa o indirectamente, ha impedido que esta Región desarrolle sus propias potencialidades. Y, paralelamente, el Estado tampoco ha creado incentivos tributarios que sean eficaces. En definitiva, no se ha optado ni por uno ni por otro camino.

Por lo tanto, es irresponsable que un país mantenga una zona geopolíticamente estratégica con este grado de deterioro y este nivel de despoblamiento.