Reacción tardía y equívoca
Por Camilo Escalona, senador por la Región de Los Lagos
10 de marzo de 2011
El Gobierno tiene que asumir la completa responsabilidad de haber puesto término a un sistema que rebaja considerablemente el precio de los combustibles.
El Presidente Sebastián Piñera se comprometió con la clase media. El grueso de los automovilistas pertenece a la clase media y los ha defraudado completamente.
El llamado Sistema de Protección ante Variaciones de Precios de Combustibles (SIPCO), con el que se quiere insistir no es la solución.
En consecuencia, el Ejecutivo tiene una reacción tardía y equivocada. Para cumplir con la clase media hay que llevar adelante el sistema que funcionó en buenos términos hasta junio del año pasado.
El argumento de que éste es un costo fiscal demasiado alto demuestra, en definitiva, que el gobierno quiere hacer recaer el costo del alza de los combustibles en la clase media del país.
En consecuencia, el Presidente Sebastián Piñera y su ministro de Minería y Energía, Laurence Golborne, deben asumir completamente la responsabilidad ante el país.
La Presidenta Michelle Bachelet, en su momento, propuso la rebaja temporal del Impuesto Especifico a los Combustibles por un tiempo prudente, para atender los efectos de la crisis internacional.
Esta disminución fue de 6 a 4,5 UTM, por metro cúbico de gasolina. Esta medida que exige ley debiese ser aplicada nuevamente.
Además, el gobierno actual decidió en el 2010 dejar sin efecto el Fondo de Estabilización que operaba hasta esa fecha y lo reemplazó por un nuevo sistema, denominado SIPCO, que no ha funcionado.
Quienes advertimos que ese era un riesgo lamentablemente probable, pedimos que se recurra a lo que dio resultado y se deje de lado lo que no funcionó, es decir, que el gobierno reponga el Fondo de Estabilización que podrá tener un mayor costo fiscal, pero que en las actuales circunstancias es ineludible.