A tercer trámite propuesta que establece requisitos para el funcionamiento de la educación parvularia

Luego que se respaldaran los dos últimos artículos que habían quedado pendientes en la discusión previa, la Sala del Senado dio luz verde en particular, al proyecto que crea la autorización de funcionamiento de establecimientos de educación parvularia.

La norma ahora volverá a la Cámara Baja, para su tercer trámite, puesto que los diputados deberán conocer los cambios realizados por los senadores.

Una de estas modificaciones dice relación con el cambio de nombre de la iniciativa. Originalmente fue bautizada como “crea la autorización de funcionamiento de jardines infantiles”, pero por unanimidad, los congresistas aceptaron que desde ahora se conozca como “crea la autorización de funcionamiento de establecimientos de educación parvularia”.

• Se aprobó, por 21 votos a favor y 9 en contra, la letra E. Así se despachó que los sostenedores de salas cunas y jardines infantiles tengan como requisito para ejercer como tales, el estar en posesión de un título profesional de a lo menos 8 semestres

• Se respaldó, por 21 votos a favor y una abstención el numeral 6. Éste indica que el Ministerio de Hacienda debe suscribir el reglamento de esta norma, que por razones obvias, es emanado por el Ministerio de Educación

Durante el debate hicieron uso de la palabra los senadores Juan Antonio Coloma, Hernán Larraín, Ignacio Walker, Andrés Zaldívar, Jaime Orpis, Alejandro García Huidobro, Víctor Pérez Varela, Jaime Quintana, Alejandro Guillier y José García Ruminot. A su vez, el Ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre intervino en algunas ocasiones para precisar el alcance de las indicaciones.

El senador Coloma hizo ver cierto nivel de confusión en los términos. “Con esta redacción le exigimos al sostenedor que tenga un título profesional, lo que suele asociarse a los requisitos que debería cumplir un docente”, explicó solicitando que los legisladores se tomen un minuto para analizar aquello, considerando lo rápido que ha resultado el debate.

En la misma línea, el senador Larraín comentó que “pueden darse situaciones absurdas como que un sostenedor tenga mayor nivel educacional que el personal de párvulos o que los primeros no puedan ejercer por tener un grado académico y no un título”. Calificó esta distinción como algo elitista y poco realista.

El senador Ignacio Walker enfatizó la evolución que ha tenido este tipo de enseñanza recordando las guarderías de los años 60, y contrastando ello con los establecimientos que hoy educan a menores hasta los cuatro años. “Creo que no basta con la vocación, es necesario que todos los actores del proceso educativo acrediten conocimientos, ese es el sentido”, resumió.

Luego, el senador Zaldívar mencionó las particularidades que implica hacerse cargo de la educación de menores. “Ya no se trata solo de guardar niños sino de ser responsables de su formación. Esto no es un emprendimiento más, de allí que sea gravitante elevar los estándares de exigencia”, aclaró.

Para el senador Orpis es fácil confundir los roles. Detalló que los sostenedores son responsables de los jardines, lo que no siempre tiene que ver con la función educativa. “Las exigencias que se ponen al personal son inferiores a las del sostenedor. Por ejemplo, los profesores deberán tener un título profesional de menos de 8 semestres, pero de no ser posible, se permite que ellos pidan una autorización especial al Mineduc para ejercer”.

El senador García Huidobro dijo ser partidario de que los sostenedores no tengan la obligación de ser profesionales, pensando en la realidad de jardines de regiones. Asimismo, advirtió la necesidad de generar un proceso de transición de manera que estos recintos educativos puedan enfrentar los cambios asociados. “Pienso en los sectores rurales, los que tal vez deban cerrar por los fuertes requisitos”, indicó.

“Creo que debemos hacer un ejercicio de coherencia en cuanto a lo que propone el proyecto”. Con estas palabras el senador Pérez Varela comenzó su intervención, recordando también que muchos jardines son administrados por las municipalidades, por lo que “no sé cómo van a cumplir la exigencia de los sostenedores”.

El senador Quintana mencionó que esta propuesta va en la línea con otros proyectos donde se busca mejorar la calidad de la educación, lo que tuvo un boom en la primera administración de la presidenta Michelle Bachelet. “Se trata de una instancia formativa y ya no sólo del cuidado de bebés. Los jardines son gravitantes, y por eso la Comisión de Educación optó por hacer responsable a los sostenedores”, resumió.

A juicio del senador Guillier, “la educación parvularia es gravitante en el desarrollo intelectual y afectivo de las personas”. Bajo esa consigna se mostró a favor de impulsar nuevas exigencias que permitan fortalecer el modelo educativo, pero a la vez, admitió que los cambios deberían hacerse de forma gradual con el fin de que los niños salgan favorecidos con la nueva ley.

Finalmente, el senador García Ruminot intervino para precisar los alcances de una indicación respecto a que el Ministerio de Hacienda debería tomar parte en la dictación del reglamento respectivo.