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Eliminación del aporte fiscal indirecto: despachan mensaje a la Cámara de Diputados

Por mayoría, los legisladores aprobaron la norma que en la actualidad -según se consigna en el proyecto- beneficia principalmente a alumnos provenientes de los hogares de mayores ingresos del país y de establecimientos particulares pagados.

21 de noviembre de 2017

Argumentando que se avanza hacia la gratuidad y que la actual norma produce segregación, el Senado despachó a la Cámara de Diputados, por 19 votos a favor y 9 abstenciones, el proyecto que elimina el aporte fiscal indirecto para las instituciones de educación superior, estableciendo una regulación transitoria para el año 2017.

 

El mensaje tiene por objeto buscar una mejor distribución de los recursos destinados a financiar la educación superior, dejando sin efecto el aporte fiscal destinado a atraer a los mejores alumnos y puntajes de la prueba de selección universitaria PSU, debido a que en la práctica este aporte beneficia principalmente a alumnos provenientes de los hogares de mayores ingresos del país y de establecimientos particulares pagados.Imagen foto_00000016

 

Durante el debate, la senadora Ena Von Baer y el senador José García Ruminot explicaron sus razones para la abstención, mientras que los senadores Ignacio Walker, Rabindranath Quinteros, Jaime Quintana y Alejandro Navarro argumentaron su voto favorable.

 

En concreto, se propone suprimir el aporte fiscal indirecto (AFI) para las instituciones de educación superior; y dispone por concepto de aporte indirecto para el año 2017, un monto equivalente a $2.000.000 miles de pesos, el que será distribuido entre aquellas instituciones de educación superior que, en el año 2016, hayan captado la matrícula en el primer año de estudios, a estudiantes que se encontraban entre los primeros 27.500 puntajes más altos en la PSU.

 

DESMEDRO PARA UNIVERSIDADES REGIONALES

           

La senadora Von Baer recordó que el AFI se asignaba a las universidades, dentro y fuera del Cruch, que recibían a los 27500 mejores puntajes de la PSU, pero este aporte se eliminó el año pasado vía ley de presupuesto, "lo que llevó a una situación de tribunales (…) Con esto solo se beneficiará a las universidades del Consejo de Rectores, dejando fuera a universidades que alcanzan buenos niveles de acreditación y de investigación y que reciben a familias de bajos ingresos. Aquí se está discriminado".

 

Una mirada distinta hizo presente el senador García Ruminot, quien señaló que "las universidades regionales hacen un gran esfuerzo por mantener a los mejores estudiantes y parte de ese incentivo era quedarse con el AFI. (…) Sin una discusión técnica adecuada, sin que exista el convencimiento de que este instrumento es malo, me abstengo".

 

SE TERMINA LA SEGREGACIÓN

 

A juicio del senador Walker, existen dos problemas principales que hacen que esta norma sea actualmente inviable. "Desde el punto de vista del aporte fiscal, en los años 80, el AFI era el 85% del aporte, pero hoy solo representa el 3,5%; por lo tanto, ha caído en desuso; además el AFI mantiene y reproduce la segregación, porque generalmente va a las universidades tradicionales donde están los alumnos que habitualmente tienen los mayores recursos", detalló.

 

Por su parte, el senador Quinteros valoró que se avance hacia la gratuidad y la corrección de la asignación. "Según cifras del Ministerio de Educación los egresados de colegios particulares pagados generan el 45% de estos recursos (…)", además argumentó que "hace tiempo está demostrado que la PSU no es indicativo de la calidad y no es el mejor instrumento para seleccionar estudiantes".

 

Posición similar defendió el senador Quintana, para quien "está demostrado que la PSU no puede ser el único instrumento de admisión a las universidades, y también está demostrada la estrecha relación entre el puntaje del estudiante y el estrato del cual proviene".

 

En tanto, para el senador Navarro el AFI "hoy no es relevante en materia de financiamiento de las universidades, pero lo que sí es claro que es discriminador, porque premia a las universidades que reciben a los estudiantes de colegios particulares pagados, en desventaja con otro tipo de jóvenes que no tienen la capacitación para rendir una buena PSU".

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