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Más actividad física en los colegios será analizada por las Comisiones de Educación y Salud unidas

Tras la aprobación de la idea de legislar, los senadores acordaron que ambas instancias abordarán la moción para contemplar ámbitos curriculares, de la mano de la idea central de disminuir los niveles de sedentarismo, obesidad y sobrepeso en menores de edad.

20 de marzo de 2018

Tras un amplio debate, los senadores respaldaron por mayoría, la idea de legislar la moción que propone estimular la actividad física y el deporte en los establecimientos educacionales. Revise nota explicativa.

 

El primer obstáculo que debió sortear el proyecto, fue que por acuerdo de la Sala se decidió que la norma deberá ser analizada en particular por las Comisiones unidas de Educación y Salud, ya que los legisladores hicieron presente que -si bien todos estaban de acuerdo con el espíritu de la propuesta- la técnica legislativa no podía dejar fuera cómo esta “promoción de la actividad física” se incorporará en la malla curricular escolar, acorde con las horas legales de clases, cantidad de profesores y monitores; además del costo de esto, por lo que también el proyecto deberá ser visado por la Comisión de Hacienda para las normas de su competencia.

    

Durante el debate los senadores Guido Girardi, Isabel Allende y Francisco Chahuán, fueron enfáticos en la importancia de la actividad física para atacar el sedentarismo, aludiendo que “los niños que no hacen actividad física tiene menor desarrollo neuronal, por eso no puede ser algo accesorio” y agregaron que “debemos ser capaces de prevenir las enfermedades crónicas no transmisibles, que se convertirán verdaderas pandemias”.

 

Por su parte, los senadores Juan Antonio Coloma, Rodrigo Galilea, Ena Von Baer y José García Ruminot, si bien valoraron el fondo de la moción, criticaron fuertemente “la forma de legislar (…) Si vamos al contenido empiezan los problemas, ¿qué se está modificando, la ley general de educación? (…) No hay que olvidar que hay un proceso en el tema curricular”; asimismo advirtieron que hay colegios que “no son capaces de demostrar su capacidad deportiva y eso es porque no utilizan bien sus horas de deporte”.

 

EL DEPORTE PARA EL DESARROLLO INTEGRAL

 

“Mente sana en cuerpo sano”, recordó el senador Kenneth Pugh, quien valoró el deporte como una práctica para “el desarrollo integral de las personas”; En tanto, el senador Alejandro Navarro indicó que este tipo de iniciativas pueden complementarse con otras de carácter público y privado, “con un esfuerzo mancomunado”.

 

Para la senadora Carmen Gloria Aravena es importante considerar a las zonas rurales, ya que no cuentan con los espacios, ni el recurso humano como para implementar el proyecto, por lo que llamó a “no discriminar”.

 

Luego, el senador Jaime Quintana valoró el debate generado y llamó a escuchar al Ministerio de Educación para complementar la medida, lo propio hizo la senadora Carolina Goic, quien reiteró que “la alta obesidad implica un riesgo, una carga que debemos asumir hoy”.

 

PROYECTO ORIGINAL

 

El proyecto original, presentado por senadores los Guido Girardi, Pedro Araya, Carlos Bianchi, Francisco Chahuán y Rabindranath Quinteros declara que el acceso a la práctica regular de actividad física y deporte contribuye al desarrollo general de los niños, niñas y adolescentes y es un elemento esencial para una educación integral, tanto en el ámbito personal como en el social.

 

Todo el sistema educativo, tanto público como privado, deberá promover la práctica regular de actividad física y deporte, debiendo  ser considerada como una estrategia de aprendizaje, que permita la formación integral de los estudiantes.

 

Establece que la práctica de actividad física deberá ser de al menos 60 minutos diarios y puede consistir en juegos, ejercicios, actividades recreativas colectivas, competitivas o no competitivas, u otras acciones que involucren movimiento corporal y que respondan a los intereses de los estudiantes, a lo largo de la jornada escolar.

 

Modifica la Ley sobre composición nutricional de los alimentos y su publicidad, incorporando la prohibición de expender aquéllos con alto contenido de calorías, grasas, azúcares, sal u otros,  no sólo dentro de los colegios, sino también en los puntos de acceso a los mismos.

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