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Apoyo a víctimas del terremoto en Ecuador "es un deber moral" e instan a reforzar la ayuda humanitaria en ese país

El Senado aprobó un proyecto de acuerdo en esa línea donde empatizaron con una de las peores tragedias que ha golpeado a ese país en los últimos 67 años y llamaron al Ejecutivo a actuar en forma urgente y mantener y reforzar los equipos de emergencia en el país vecino.

5 de mayo de 2016

Imagen foto_00000014Un llamado al Gobierno a mantener y reforzar la ayuda humanitaria con el pueblo de Ecuador golpeado por un violento terremoto el 16 de abril pasado, de 7,8 grados en la escala de Richter realizó el Senado tras aprobar en la víspera un proyecto de acuerdo en esa línea, donde se considera "un deber moral" permanecer al lado de sus víctimas.

(Boletín Nº S 1.868-12)

 

La iniciativa fue impulsada por un grupo transversal de los senadores: Carolina Goic, Ena Von Baer, Andrés Allamand, Pedro Araya, Carlos Bianchi, Francisco Chahuán, Jose García Ruminot, Alejandro García-Huidobro, Guido Girardi, Felipe Harboe, Antonio Horvath, Ricardo Lagos Weber, Carlos Montes, Alejandro Navarro, Víctor Pérez Varela, Jorge Pizarro, Baldo Prokurica, Jaime Quintana, Rabindranath Quinteros, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

 

En el texto solicitan a "la Presidenta de la República que, si lo tiene a bien, disponga el envío de ayuda humanitaria a Ecuador por el reciente terremoto que afectó a dicho país".

 

En la iniciativa los impulsores del proyecto de acuerdo solidarizan con la tragedia ocurrida y recordaron que, en febrero de 2010, Ecuador fue uno de los países que actuó decididamente ante la comunidad regional para otorgar apoyo y ayuda a las zonas más golpeadas.  Incluso, recordaron que "el presidente Rafael Correa, recorrió personalmente el sur del país pese a que se encontraba con muletas".

 

Por estas razones, el Senado instó al gobierno a mantener y reforzar las líneas de ayuda humanitaria para el pueblo de Ecuador, conforme al Memorando de Entendimiento de la Red de Apoyo Humanitario, que establece protocolos de coordinación con la comunidad internacional en caso de catástrofes.

 

Asimismo solicitaron "poner a disposición un contingente de profesionales con experiencia del Ministerio de Vivienda y Urbanización para brindar apoyo técnico a las labores de reconstrucción y viajen en las próximas semanas a Ecuador".

 

A su vez, pidieron que "se brinde ayuda a través de la Oficina Nacional de Emergencia (ONEMI) del Ministerio del Interior y Seguridad Pública dentro de los protocolos internacionales".

 

En la misma línea, señalaron que "a través de la Embajada de Chile en Ecuador se realice un catastro de los daños que sufrieron los compatriotas chilenos residentes en ese país y se evalúe el envío de ayuda para dicha comunidad, conforme a protocolos internacionales".

 

Por otro lado, instaron a la Presidenta a abogar ante los organismos internacionales de modo de recurrir en apoyo y brindar ayuda humanitaria respecto del Estado Ecuatoriano.

 

ANTECEDENTES

 

El terremoto que afectó a Ecuador el 16 de abril devastó las poblaciones de Pedernales, Muisne, Cojimies, entre otras que también resultaron afectadas.

 

De acuerdo al Informe de Situación N°56 del 02 de mayo de 2016 elaborado por el equipo Técnico Secretaría de Gestión de Riesgos del Ecuador, el fuerte movimiento sísmico dejó un saldo lamentable de 660 personas fallecidas, 23 personas desaparecidas, un registro hasta el momento de 51.376 atenciones en salud, de las cuales 4.605 corresponden a personas heridas y han existido 113 personas rescatadas con vida.

 

Según el Ministerio de Inclusión Económica y Social del Ecuador, con corte al día 02 de mayo, informa que se encuentran albergadas 5.506 familias y 22.754 personas. Se ha identificado 563 personas con discapacidad albergadas, de las cuales 327 están en albergues y 236 con familias acogientes.

 

A su vez, el informe señala que se han entregado 315.273 KITS de alimentos y existen 166 escuelas con afectación media y grave de 560 afectadas. Sumándose a todo esto puentes cortados, casas colapsadas, carreteras averiadas, rutas intransitables e infraestructura pública dañada.

 

El mismo informe da cuenta que en materia de seguridad integral de la población se cuenta con 13.185 efectivos de las Fuerzas Armadas desplegados así como 7.256 efectivos de la Policía Nacional en la zona afectada.

 

El presidente Correa calificó las pérdidas de multimillonarias, "calculó a groso modo tres mil millones de dólares, un tres por ciento del Producto Interno Bruto y eso significa reconstrucción de años. Es una lucha larga (...)". Las ciudades más afectadas han sido Pedernales, Portoviejo y Manta. Además, se calcula que 20 mil personas quedaron sin hogar y serán ubicadas momentáneamente en refugios.

 

La exposición de daños preliminar realizada el pasado 23 de abril por el presidente contabilizó 6 mil 622 viviendas derribadas, 13 edificios de salud afectados y 281 instituciones educativas con daños diversos. Mientras que en la infraestructura estratégica se registran 71 kilómetros de vías perdidas, siete mil 81 kilómetros de tendido eléctrico destruido y 118 estaciones móviles de telefonía tanto públicas como privadas afectadas.

 

Para enfrentar la crisis, Ecuador, y para mantener el orden del país, su Gobierno decretó estado de excepción en todo el país con el fin de garantizar el orden y la seguridad de los ciudadanos y de los bienes de éstos.

 

EMPATÍA Y REFLEXIÓN

 

En el proyecto de acuerdo aprobado, el Senado asegura que "es del caso considerar que, con la experiencia que ha tenido nuestro país producto de los terremotos que nos han afectado, existe la capacidad para que podamos ofrecer un contingente de profesionales del gobierno para que viajen a colaborar en las próximas semanas a Ecuador, a prestar ayuda técnica que permita sumarse a las labores de reconstrucción".

 

Agregan que, "hoy más que nunca debemos demostrar la solidaridad y el compromiso con el pueblo hermano ecuatoriano luego de esta catástrofe, a través de esta iniciativa que sólo busca ayudar. Siendo lo mínimo que como país podemos hacer en esta situación de emergencia".

 

No obstante, lamentaron que "nuestro país, a pedido de Ecuador envió 49 rescatistas a colaborar con los trabajos de búsqueda de personas atrapadas y desaparecidas por el terremoto, sin embargo, estos ya regresaron a nuestro país, no entendiéndose esta situación considerando que aún hay personas que no se localizan y que los equipos de los otros países continúan en las labores de búsqueda".

 

Por lo tanto, consideraron que es "indispensable que el Gobierno de Chile agote todos los medios para apoyar al pueblo ecuatoriano ahora, porque nuestro país conoce el horror de un terremoto y es un deber moral apoyar ahora a Ecuador. Miles están sufriendo y nuestra respuesta como país y como ciudadanía debe estar a la altura de nuestra capacidad y demostrada solidaridad".

 

En ese orden de ideas, recordaron que "tras el terremoto 8,8 y posterior tsunami que afectó a nuestro país el 27F en 2010, el presidente de Ecuador Rafael Correa viajó a nuestro país y visitó la zona afectada en la octava región reuniéndose con afectados en el Parque Ecuador de Concepción".

 

"En dicha oportunidad el mandatario ecuatoriano andaba con muletas, le costaba caminar, pero de igual forma se dio el tiempo e hizo todos los esfuerzos para recorrer algunas comunas afectadas, hablar con los damnificados y entregar ayuda humanitaria".

 

Junto con ello, se comprometió en su calidad de, en ese entonces, Presidente Pro Témpore de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) tratar el tema en la cita de presidentes que tendría lugar en abril de ese año para enviar más apoyo a nuestro país.

 

Asimismo, mencionaron que "el presidente Correa no llegó solo a la región del Biobío, sino que trajo consigo un valiosísimo cargamento con 40 toneladas de ayuda, además de 15 médicos y tres enfermeras para apoyar las labores en los campamentos. Y, expresó en dicha ocasión que estaba seguro que Chile habría hecho lo mismo con ellos".

 

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