Proponen mayor tributación para las grandes empresas

La necesidad de una reforma tributaria profunda, hizo presente el senador Manuel José Ossandón, pero advirtió que la mayor preocupación es la ambigüedad de los cambios propuestos para el sistema educacional.

"A mí lo que más me preocupa es que el Gobierno esté poniendo la carreta antes que los bueyes. Soy consciente que la reforma la pueden aprobar sin nuestros votos, pero mi impresión, pese a eso, es que si pides aprobar una reforma tributaria para mejorar la educación, al menos deberías saber con datos específicos en qué consiste la reforma educacional. Los dos proyectos deberían ser paralelos, porque la reforma a la educación es la gran esperanza de la gente. Lo que menos queremos de estos cambios, o reforma a la educación, es que se convierta en un segundo Transantiago, porque de verdad la gente está muy esperanzada en que esto pueda ser el motor de partida de algo que les cambie  la vida", afirmó.

Sobre lo mismo, el legislador aseguró que "la reforma tributaria hay que hacerla de todos modos, pero más que uniformar en 25% la tributación de las empresas, yo preferiría que los grandes pagaran un 30%, las medianas 25% y las más pequeñas queden bajo el 20% actual".

Asimismo, afirmó que algunos señalan “que subiendo el impuesto a los grandes podemos afectar el crecimiento o puede haber desempleo, pero pienso que esa es sólo una amenaza, porque no creo que los bancos, por ejemplo, tengan problemas para hacer un esfuerzo extra. Otros dicen que el aumento lo terminarán pagando los consumidores, pero eso tampoco es así, porque la competencia termina regulando los precios. Por lo demás, si las grandes empresas financian campañas millonarias de políticos y ayudan a partidos y movimientos políticos para que funcionen, eso significa que también deberían aportar para que los chilenos más vulnerables puedan mejorar su calidad de vida", aseguró.

LEGADO

En otro ámbito, el parlamentario criticó los objetivos de la Fundación del ex Presidente Sebastián Piñera. "la idea de defender el legado del Gobierno la podrían haber hecho hace dos años en La Moneda haciendo una autocrítica de lo que estaba pasando en ese momento. Si hubieran tenido un poco de humildad hoy estaríamos en la Moneda analizando la continuidad de nuestra obra", manifestó.

Además, hizo hincapié en que "la gente quiere líderes que busquen la solución de los problemas y no historiadores que defiendan el legado de gobiernos anteriores. La Fundación Futuro del ex Presidente parece que es la Fundación Pasado; los chilenos no quieren a gobernantes que defiendan sus legados personales. La gente quiere que los defiendan a ellos, que les mejoren su calidad de vida, que los salven de los abusos".