Un plazo adicional innecesario

El proyecto que entrega un nuevo plazo de 90 días a las concesionarias de radio difusión de mínima cobertura para acogerse a la ley N° 20.433, busca que puedan beneficiarse de esa nueva legislación las llamadas “radios de mínima cobertura” o “radios comunitarias”.

Muchos de nosotros creemos, y así también lo estima la Asociación Nacional de radios Comunitarias de Chile (ANARCICH), que hubo un plazo más que suficiente para beneficiarse de lo que establece esa nueva ley, que fue publicada hace más de tres años, el 4 de mayo del 2010.

En los hechos y de acuerdo a lo que han señalado los dirigentes de ANARCICH, los que están siendo beneficiados con esta prórroga que se está planteando no son necesariamente pequeñas radios comunitarias como todos las conocemos.

Al contrario, acá hay empresas, hay gente que tiene muchas radios comunitarias que las inscriben, porque de esa manera es más fácil tener acceso a las emisoras y al dial. La extensión propuesta, va a beneficiar a empresas y personas jurídicas que persiguen fines de lucro y de paso a los municipios, respecto de los cuales la nueva ley no contempla como concesionarias de radios comunitarias. Entonces, va a haber un plazo que al final del día va a beneficiar de manera encubierta a aquellos que pretendiendo tener radio comunitaria, van a perseguir fines de lucro.

Estas empresas tuvieron tres años para acceder sus concesiones a organización no lucrativas y no lo hicieron.

Y lo que incomoda a aquellas empresas que cumplieron con la ley, que son las verdadera comunitarias, las que pelearon la modificación a la ley durante tantos años, que todavía incluso están insatisfechos con respecto a la norma actual, es que hoy día se está legislando para permitir una transición adicional a aquellas radios que en su esencia no son comunitarias.

Si esto fuera y tuviera la convicción de que la mayoría de los casos que vamos a legislar son para aquellas radios que cumplen su función de fomentar la libertad de expresión, la diversidad local, de fortalecer a las comunidades, no tendría problema en permitir este plazo.

Pero en estos tres años y medio si hay alguien que aprovechó la ley y cumplió con la misma han sido las verdaderas radios comunitarias.

Por eso voté en contra de la ampliación del plazo.