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  2010: Buen balance y proyecciones

  Por Carlos Kuschel, senador por la Región de Los Lagos

30 de diciembre de 2010

ImagenEl año del Bicentenario termina con un buen balance y firmes proyecciones en todos los indicadores y tareas de interés de los chilenos. Las dificultades en otros importantes países del mundo nos elevan en el paisaje internacional. América Latina también sale favorecida destacando nuevamente nuestro Chile.

 

Tenemos importantes progresos en empleo, las últimas cifras así lo demuestran y para reducir la pobreza. Las inversiones y el crecimiento económico están altos.

 

Por otro lado, el orden fiscal y la disciplina monetaria son notables en la mayor parte de los países de Latinoamérica.

 

Parece que hubiéramos aprendido todas las lecciones olvidadas por los profesores de Norteamérica y Europa.

 

No obstante, en esta buena situación y excelente panorama también se esconden desafíos y escollos que son nuestras tareas pendientes.

 

Por ejemplo, la vitalidad de las inversiones sobre todo en minería, en el norte del país, puede derrumbar aún más el tipo de cambio y afectar a las regiones no mineras y que aún tienen escasa infraestructura vial y portuaria. Tal es el caso del inconcluso Camino a Chile que impide contar con nuestra ruta longitudinal en la parte sur del país.

 

Nos faltan puertos más modernos, versátiles y aeropuertos más independientes de Santiago. O sea aquí se articulan el centralismo con el bajo tipo de cambio.

 

Otro desafío de gran preocupación es la concentración económica en sectores claves de nuestra economía. En la zona sur nos preocupa el caso del procesamiento de la leche, a raíz del anuncio de fusiones de importantes empresas.

 

Entendemos la pequeñez de nuestro mercado, pero tal vez podamos pensar en otro tipo de apertura y de trabajo conjunto con Argentina u otros países.

 

La disponibilidad de energía sigue siendo un gran desafío por su alto costo y su origen cada más contaminante y sucio. Sin embargo, en esta materia se ha visto lo difícil e inseguro de trabajar con nuestros países vecinos.

 

Pero las oportunidades del mercado internacional especialmente los países emergentes, las economías más sólidas dentro de los bloques como Alemania o algunos sectores dentro de Estados Unidos; casi la totalidad de China, India y otros países asiáticos generan enormes ventajas para nuestro país que exceden largamente nuestras perspectivas.

 

Esto nos hace estar optimistas a pesar de las precauciones que he señalado.

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