Cumplir los compromisos

La Comisión de Salud que presido evaluó las modificaciones que le hizo la Cámara de Diputados al proyecto que perfecciona el sistema de otorgamiento y uso de licencias médicas, y por mayoría decidió rechazarlas con el objetivo de que esta iniciativa vaya a una Comisión Mixta de senadores y diputados.

Cuando se planteó por primera vez este tema, dijimos que había que partir del principio de sancionar con mano dura a quien emite licencias fraudulentas y también a quien las solicita.

La licencia es un subsidio por incapacidad laboral temporal que se le entrega a un trabajador por parte del seguro de salud en el cual cotiza. Hay que recordar que esto no es gratis, no es una dádiva, a uno le hacen un descuento todos los meses, sea Fonasa o Isapre. Claro que en ese último caso, el descuento es de un 9% en promedio, más que el 7% de Fonasa. Y, bueno, en parte eso explica las tremendas utilidades que han tenido las Isapres, para que, justamente, cuando uno se enferme le den las prestaciones de salud y le paguen el sueldo. El reposo es parte del tratamiento.

Hemos visto que aquí hay una asimetría en el sentido de que se sanciona a quien emite licencias fraudulentas, pero muchas veces, la mayoría de las veces, tenemos que quien evalúa la pertinencia de una licencia es juez y parte. Las Isapres evalúan si una licencia está bien o mal emitida y emiten un juicio arbitrario, unilateral, sin ver al paciente, sabiendo todos que es incumbente, porque además, por licencia rechazada son más recursos para la Isapre.

Pero más allá de eso, llegamos a un acuerdo con el Ministro de Salud en la Comisión. Él dijo "nos comprometemos a resolver el problema de la llamada carestía de los tres primeros días". ¿Qué significa eso? Significa que toda licencia médica de diez o menos días se empieza a pagar a partir del cuarto día. Eso tiene, evidentemente, una connotación negativa para el enfermo, porque un paciente que necesita cuatro días de reposo muchas veces ni siquiera se lo toma porque no está dispuesto que le paguen, si es de cuatro días, un solo día; o si es de seis, dos días.

Nosotros por eso mismo, somos del principio de sancionar a quien abusa, pero también respetar el derecho al reposo y al subsidio de quien de verdad está enfermo.

Entonces, se dijo: "aprueben este proyecto y cambiamos la votación de la Comisión de Salud que ya había sido en contra en esa ocasión, y le pedimos a la Concertación y a la Oposición que votara a favor en la Sala, en el entendido que se iba en la Cámara de Diputados, en el otro trámite, a reponer el pago de los tres primeros días".

Además, entremedio,  apareció la circular N° 2727, si no me equivoco en el número, que dice relación con la licencia por enfermedad grave del niño menor de un año. Si bien no queremos abusos, es importante entender que lo que dice esa circular es absolutamente aberrante. Tanto así, que la Sociedad Chilena de Pediatría nos ha pedido que rechacemos esa circular, que denunciemos lo que está ocurriendo, porque desvirtúa el sentido más profundo que tiene este derecho de la madre. ¿En qué sentido? Porque para que al niño o a la mamá le den la licencia tiene que haber bajado de peso el niño o se debe haber detenido su crecimiento.

Para que una enfermedad detenga el crecimiento de un menor de un año o afecte su peso, tiene que ser bastante compleja. Por tanto, en la práctica ninguna madre va a tener derecho a ese tipo de licencias.

Es respecto de los dos temas, que el Gobierno no se pronunció y no cumplió el compromiso. Es esa la razón por la cual, junto a los senadores Mariano Ruiz-Esquide y Guido Girardi, votamos en contra en la Comisión de Salud y también en la Sala, esperando que se constituya una Comisión Mixta y se cumplan ahí los compromisos. Uno entiende que en democracia Gobierno y Oposición llegan a acuerdos y se puede generar un clima de entendimiento, en la medida en que las dos partes cumplan los compromisos que se suscriben.