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Esto no apunta al problema de fondo

Por Jorge Pizarro, Presidente del Senado

24 de mayo de 2013

Imagen foto_00000014Las cifras del último Censo –a pesar de las dudas sobre su fiabilidad- muestran que Chile ha reducido su tasa de natalidad, generando un preocupante escenario futuro, tanto para la expansión de nuestro desarrollo económico, como principalmente para el modelo social que queremos para el país. El dato es así de preocupante: 1,8 hijos por mujer. Se dice con un sesgo de chovinismo que se trata de tasas similares a las que exhiben los países desarrollados, pero la mala noticia es que se dan en un país que mantiene serias y graves desigualdades.

 

El Presidente de la República, en su último mensaje a la Nación, anunció la entrega de otro Bono, esta vez para incentivar la maternidad, el cual se entregaría a partir del tercer hijo. Se trataría de 100 mil pesos por cada nuevo chileno o chilena que llegue al mundo.

 

Por supuesto que hubo quieres consideraron -sin pensarlo mucho siquiera- que era una de las ideas más geniales propuestas por la derecha en estos años. Con todo respeto, hay otros que consideramos que esto no apunta al problema de fondo, por decirlo de una manera elegante. Desde distintos foros, se ha replicado a este enuncio, considerándolo simplista y de vuelo rasante, porque pretende resolver temas de gran complejidad sociológica, económica y de proyectos de vida, con un voucher , un bono de…100 mil pesos.

 

No hace mucho, algunos estudios, uno de un economista independiente y otro de una Universidad, decían que en Chile, la crianza de un niño podía alcanzar fácilmente los –lea bien- ¡155 millones de pesos en el estrato ABC1-C2! Si usted es del segmento C3, la cifra baja considerablemente a $46,5 millones de pesos y si tuvo la gran mala suerte de ser pobre, el gasto no baja de los 18 millones de pesos.

 

Un estudio similar decía que para la clase alta la cifra llega a 130 millones y las familias que ganan menos de 350 mil pesos mensuales, deben desembolsar 45 millones por cada hijo. En todos estos casos, estamos hablando de dinero que NO considera la universidad, vale decir, hasta que su hijo o hija cumpla recién los 18 años.

 

Bueno, lo dramático es que en nuestro país, más del 66% de las familias vive con menos de 650 mil pesos al mes. Es cierto que vimos un carrusel de cifras de pleno empleo, trabajo de calidad y varias otras proyecciones bien impresionantes, pero muchas de ellas no se ajustan a la realidad. Pero más allá de la polémica, lo cierto es que criar un hijo con costos cercanos a los 46 millones de pesos para la clase media, hace que los 100 mil pesos ofrecidos por el Gobierno se vean casi como una tomadura de pelo, más allá de que se trate de “una señal” como dijo un ministro al intentar defender esta idea.

 

¿100 mil pesos? Tenemos una mejor propuesta. ¿Qué tal si ofrecemos un modelo de educación gratuita para los sectores más necesitados, de calidad para todos los estratos y que entregue herramientas de capacitación y proyección al futuro? ¿Qué tal si ofrecemos al país un sistema de pensiones que asegure ingresos dignos para la vejez y en el que las AFP no se lleven todas las ganancias sin ningún tipo de responsabilidad por las fallas del sistema? ¿Y si le damos a los chilenos un sistema de salud que los proteja y que no sólo aumente las escandalosas ganancias de los dueños de las ISAPRES? ¿Y si le damos posibilidades de reconocimiento a todos los tipos de familia y no sólo a la que le gusta a la derecha?

 

O mejor aún, ¿si hacemos que las pymes tengan mayores facilidades para sortear las negociaciones con la gran empresa y así permitir que los que más ganan, paguen más impuestos? Eso redundaría en mejores sueldos y empleos realmente de calidad. Podría apostar que con mejor educación, salud garantizada a precios razonables, pensiones dignas, carreras laborales respetadas y bien remuneradas, mejor calidad de vida en las ciudades, menos contaminación y más espacio y tiempo para disfrutar en familia, habría muchos más niños y niñas. Invitamos al gobierno a darle una vuelta a estos asuntos.

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