Click acá para ir directamente al contenido

Intransigencia, desaceleración económica y desconfianza

Por Juan Antonio Coloma, senador por la región del Maule

5 de septiembre de 2014

Imagen foto_00000019Si seguimos por el camino de la intransigencia que el Gobierno ha asumido en materia económica, creo que las cifras que nos informó  el Banco Central en su último Informe de Política Monetaria (Ipom), van a seguir empeorando, lo que nos afecta a todos, particularmente a las familias por la pérdida de empleo.

 

Debemos comprender que el país se construye a partir de acuerdos, de entendimiento, no pasando la aplanadora, ni pretendiendo hacer Chile de nuevo porque eso no lo quiere el país y eso sólo genera desconfianza.

 

El Banco Central nos dio quizá una de las peores noticias de los últimos años en materia económica. Nos dice que el producto, la inversión, el consumo, el empleo y las importaciones van a la baja. Es decir, todos los indicadores que suponen actividad, crecimiento, fortaleza y desarrollo, todos van a la baja, y aquellos que suponen problemas, como la tasa de desempleo, va al alza.

 

Si uno compara, desde un punto de vista técnico estas cifras, sólo son comparables a la crisis asiática o en la crisis subprime. La gran diferencia es que hoy día no tenemos un mundo hostil, sino uno normal, puesto que y todos los países -menos Venezuela- tienen una tasa de crecimiento, de desarrollo y de inversión más alta que Chile.

 

No se puede culpar al Banco Central de la situación actual, que sólo es el mensajero de malas noticias. No es responsabilidad de este organismo, aun cuando no deja de ser sintomático que respecto del producto, la proyección que se hizo hace un tiempo atrás, se equivocó en más de un 50%, lo que revela que el problema en Chile es mucho más agudo de lo que jamás habíamos imaginado.

 

Si bien hay  quienes consideran que el país atraviesa por un problema coyuntural, lo curioso es que esto parece no tener su origen en temas económicos. Algún grado de responsabilidad pueden tener los precios de los commodities, pero el grueso de las malas cifras responde a decisiones políticas. El problema de la economía hoy es la política y básicamente, la desconfianza que distintas decisiones del Gobierno están generando en los agentes productivos.

 

Creo que el Ejecutivo debe hacer frente a este problema, puesto que tiene una tremenda responsabilidad. Corresponde al Gobierno dar confianza, porque lo que se ha perdido en Chile es la confianza. Para eso debe declararse con claridad, que Chile no se va a refundar, ni hacer de nuevo. Hay que actuar con moderación, y ello implica alcanzar acuerdos en las reformas que se están impulsando como son: la constitucional, la laboral, la educacional y a la relativa al agua.

 

Imprimir