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Indicación sustitutiva a protección de glaciares: los cambios que generan polémica

El objeto a legislar y los niveles de protección fueron los contenidos que han sido cuestionados, en particular la condición en que quedan los llamados glaciares rocosos que se ubican en el norte del país.

12 de octubre de 2019

En condiciones de comenzar a votar el articulado del proyecto sobre protección de glaciares, que cursa su primer trámite, se encuentran los integrantes de la Comisión de Minería y Energía. Ya conocida una indicación sustitutiva que presentó el Ejecutivo, los legisladores decidieron revisarla en detalle de manera de concordar visiones.

 

Se espera que el próximo miércoles 16 de octubre, comience el análisis del texto que tiene como contenidos fundamentales el objeto a legislar y las categorías de protección en torno a este objeto. Una vez que se zanjen estas disposiciones, la iniciativa pasará a la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales, y luego a la Sala.

 

La sesión del pasado 2 de octubre no estuvo exenta de polémica luego que el ministro de Minería, Baldo Prokurica detallara la indicación sustitutiva que habría sido concordada en un comité técnico. Esta redacción abrió un abanico de críticas respecto al real interés del gobierno de cuidar estas reservas de agua.

 

INDICACIÓN SUSTITUTIVA

 

El secretario de Estado explicó que “esta es una indicación que se hizo sobre la base de un trabajo que realizó un comité donde participaron ex ministros, ex directores de la Dirección General de Aguas, técnicos y profesionales de la Universidad de Chile, quienes prepararon un informe respecto del proyecto original y del cual se obtuvo, a mi juicio, un trabajo científico aglutinando elementos serios, especialmente, en lo que es la definición de glaciar, que se apega a las que se usan a nivel internacional”.

 

De acuerdo al Ejecutivo, la indicación sustitutiva genera una estructura de protección de los glaciares que prohíbe intervenciones directas a los descubiertos y cubiertos, tales como remoción, traslado y cubrimiento con material de desmontes y/o escombros. Este mecanismo permitiría cuidar el 98,5% de la superficie glaciar del país y el resto quedaría resguardado a través de un permiso especial de la Dirección General de Aguas (DGA).Imagen foto_00000003

 

Entrando en materia, el comité técnico propuso que el objeto de protección esté radicado en los glaciares, pero en función del servicio ecosistémico en cuanto a la provisión de agua y su rol regulador del recurso hídrico, tanto actual como futuro. Esto va en contra de aquellos que quieren resguardar los glaciares por sí mismos.

 

También el texto acota la mayor parte de las definiciones de esta iniciativa, así establece categorías de protección, señalando qué se puede hacer en los glaciares en específico y qué no.

 

  • Primera categoría de protección: se establece una prohibición absoluta de todo proyecto o actividad que pueda afectar glaciares en reservas de región virgen y parques nacionales. Éstos representan un 83,6% de este recurso a nivel nacional, los que se concentran en el extremo sur del país.

 

  • Segunda categoría: se establece la prohibición total de afectación a glaciares cubiertos y descubiertos fuera de reservas de región virgen y parque nacionales, en cuanto a su remoción, traslado y cubrimiento con material de desmontes y/o escombro. Éstos representan un 14,8% en el país.

 

  • Tercera categoría: corresponden a los glaciares descubiertos y cubiertos fuera de reservas de región virgen y parques nacionales, los que representan un 1,54% de la superficie glaciar total, más conocidos como glaciares rocosos. Se establece que aquellos proyectos o actividades que se sometan al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) a través de un Estudio de Impacto Ambiental (EIA), cuya “área de influencia alcance a glaciares rocosos y su entorno”, deberán obtener un Permiso Ambiental Sectorial (PAS) específico otorgado por la DGA.

 

INTERPRETACIÓN

 

Grupos ambientalistas han interpretado esta división, planteando que la definición de glaciar contempla todos los cuerpos de hielo que superan una hectárea. En tal sentido, se critica que no se asegure la debida protección a los glaciares que están en la zona norte, los cuales no están ni en reservas nacionales ni en parques nacionales.

 

También se cuestiona que la indicación proponga como sistema de protección que se sometan los proyectos a un estudio de impacto ambiental, lo que según algunos implica abrir una puerta para que las mineras puedan cumplir con la norma permitiendo desarrollar sus inversiones en dichas zonas.

 

Al respecto el autor de la moción, el senador Guido Girardi –presidente de la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales- ha manifestado que la indicación permitirá que la DGA entregue un permiso sectorial que autorice proyectos en glaciares rocosos, bajo determinadas “condiciones técnicas”.

 

De acuerdo al congresista, la indicación ha generado polémica, ya que afectaría directamente las reservas estratégicas de agua dulce, e iría en contra del resto del espíritu del proyecto, que pretendía impedir la realización de proyectos que afecten a los glaciares, evitando de su remoción, traslado y cubrimiento.

 

 

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