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Aislamiento social y efectos en estudiantes: un 80% no cuenta con un lugar propicio para concentrarse

Esa fue una de las estadísticas estudiadas en el marco del Seminario de Salud Mental, donde se hizo un testeo del estado anímico de la comunidad educativa. También se abordó la urgencia de entregar un mensaje claro a la población en general, porque la incertidumbre es el principal enemigo de la siquis.

5 de mayo de 2020

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Palabras como aburrimiento, ansiedad e incertidumbre se repitieron en voz de los especialistas que participaron del Seminario de Salud Mental organizado por al Comisión de Salud del Senado en conjunto con la Universidad de Chile.

 

Una conclusión central a las que llegaron los participantes y los senadores que se hicieron presentes en el evento que se realizó vía zoom (Carolina Goic, Guido Girardi y Francisco Chahuán), fue la urgencia de entregar un mensaje claro a la población respecto al aislamiento social y la vuelta a clases. El no saber lo que pasa es lo que más perjuidica la siquis.

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La actividad se realizó en dos paneles. En el primero denominado “Políticas estratégicas para protección de salud mental en contexto de pandemias”, intervinieron la presidenta de la Comisión de Salud, la senadora Goic; el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi; el jefe del departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsal), Matías Irarrázaval; y la siquiatra infanto-juvenil representate del Colegio Médico, Josefina Hunneus.

 

En el panel “El impacto de las medidas educacionales en la salud mental de las personas” hicieron uso de la palabra la directora ejecutiva de Educación 2020, Alejandra Arratia; la directora del Núcleo Milenio para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes, Vania Martínez; y la alcaldesa de la comuna de Peñalolén, Carolina Leitao.

 

INFORMACIÓN CLARA

 

La urgencia de abordar el aislamiento social desde lo colectivo con énfasis en los efectos que genera en la sicología de las personas fue el tema analizado por el rector Vivaldi, quien ejemplificó indicando que “es lo mismo a lo que ocurre con un equipo de fútbol. Cuando le meten un gol y va en contra en el marcador, el colectivo y cada uno de los jugadores se ven afectados anímicamente. En este caso es lo mismo”.

 

A la hora de plantear un diagnóstico y soluciones tentativas, la autoridad académica destacó el trabajo que ha realizado el plantel que dirige. “Hemos lanzado un portal donde se concentra toda la información que hay sobre la pandemia. Es un esfuerzo de la Vice Rectoría de Extensión que creemos que es de mucha ayuda porque enfrenta los desafíos que implica el aislamiento y el virus propiamente tal”, graficó.

 

El representante del Minsal explicó que los dos grandes condicionantes que estresan a la población en este nuevo contexto, son la pérdida de empleos y el cierre de establecimientos educacionales. “En el mundo 20 millones de personas han quedado cesantes y mil 250 millones de escolares están en sus casas y eso es lo que más desestabiliza la salud mental”, describió.

 

Desde lo local manifestó que “en nuestro país hemos aplicado el protocolo de gestión de riesgo de desastres que es el que se usa con ocasión de terremotos, erupciones volcánicas, inundaciones e incendios masivos, pero hemos debido adaptarlo a la pandemia. Acá hay un estrés que se ha mantenido ya por meses, entonces es muy distinto a intervenir a una comunidad acotada que vivió una situación traumatizante”.

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Desde las soluciones, la autoridad hizo énfasis en la Guía Práctica de Bienestar Emocional que lanzó el Minsal, orientada a los distintos públicos que han visto afectada su emocionalidad (niños, estudiantes, adultos mayores, mujeres, personas en condición de riesgo por uso de sustancias y alcohol, migrantes, gente en condición social vulnerable económica y socialmente, etc.)

 

A su vez, el Colegio Médico ha realizado una labor conjunta con el Minsal y la Universidad de Chile efectuando una evaluación semanal desde lo mental. “Creemos que no hay salud mental si no están garantizados los servicios básicos para subsistir (alimentación, techo, abrigo y ahora, los elementos de seguridad personal para no infectarse de COVID 19), por eso hicimos una bajada para la población en general y otra para el personal de salud”, comentó Hunneus.

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La especialista recordó que “hoy más que nunca la comunicación es fundamental. Las personas deben sentir confianza y credibilidad en la información que entregan las autoridades para no verse afectados por una percepción al riesgo errada; debe haber un anuncio temprano de las medidas; y la transparencia de los datos debe estar avalada por datos científicos”.

 

ABURRIMIENTO Y ANSIEDAD

 

Analizando el impacto que ha tenido el cierre de jardines infantiles, escuelas, colegios y universidad en la salud mental de los estudiantes, Educación 2020 presentó una encuesta denominada #EstamosConectados que fue aplicada a distancia, entre el 26 de marzo y el 17 de abril a profesores, estudiantes, apoderados y directivos del país. La muestra incluyó a 560 colegios y se recibieron más de tres mil 500 respuestas.

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Dentro de los datos destacados por Arratia, está que “un 80% de los estudiantes reconoce no contar con un ambiente que le permita concentrarse para estudiar, solo un 24% puede pedirle ayuda a un adulto, y la mitad de los encuestados tiene acceso a un computador con internet estable. A nivel de emociones lo que más se repite es la ansiedad, aburrimiento, estrés, molestia, frustración, preocupación y miedo”.

 

Fruto de lo anterior, la entidad enfatizó que “es necesario entregar algún margen de claridad. Decir, por ejemplo, no sabemos cuándo volveremos a clases, pero creemos que en septiembre podrían estar dadas las condiciones. Lo peor es que la medida se esté evaluando semana a semana. También hemos recomendado la pertinencia de suspender el SIMCE y que se asegure el sostenimiento basal de las escuelas, pese a los problemas de asistencia que se van a observar en un retorno”.

 

Luego el Núcleo Milenio para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes (IMHAY) destacó un estudio realizado por la Universidad Alberto Hurtado a tres mil personas, de los cuales 395 eran estudiantes de entre 18 y 25 años, quienes habían vivido una cuarentena de a lo menos 14 días. “Las cifras se repiten. Un 80% habló de haber experimentado ansiedad, un 70% tener problemas de concentración y un 61% presentar problemas para dormir. La principal angustia es a enfermarse y a contagiar a un ser querido, o que uno de ellos muera por la pandemia, y en gran parte la preocupación se acrecienta a mayor exposición a las redes sociales y los medios de comunicación”, describió Martínez.

 

Una de las iniciativas que pondrá en marcha próximamente el organismo, es una campaña para estudiantes de primer año de las distintas carreras que imparte la Universidad de Chile. “La idea es apoyar a los mechones que han vivido tiempos especialmente difíciles: un cuarto medio fracturado por el estallido social, una PSU varias veces postergada y ahora un inicio de las clases incierto. Queremos ver cómo está el estado de ánimo y apoyarlos”, mencionó la especialista.

 

Finalmente la alcaldesa de Peñalolén relató el programa de Salud Mental Infantil que el municipio ha desarrollado en los últimos años. “Veníamos una alta tasa de suicidios en adolescentes, por eso comenzamos a poner especial atención en la juventud. Hoy recibimos consultas esponáneas, se tramitan en la atención primaria donde sicólogos y siquiatras concertan las citas y van haciendo seguimiento. Sin duda que por la crisis sabemos que los trastornos mentales van a aumentar y van a aparecer otros”, expresó.

 

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