Reconstrucción se prolongará más allá de este gobierno

El Gobierno ha ido por un camino correcto en lo que se refiere al financiamiento del proyecto de reconstrucción, es decir, proponer un mix entre impuestos, endeudamiento, fondos del cobre, ley reservada del cobre. Sin embargo, estoy convencido de que el aumento de los impuestos a la renta, debieran mantenerse como impuestos permanentes.

Ello porque -y creo no equivocarme- no va a bastar el período de este Gobierno para poder reconstruir este país después del terremoto y maremoto que el país ha sufrido. Vamos a pasar más allá de este Gobierno, vamos a necesitar más tiempo que el periodo de cuatro años para reconstruir.

Además  me parece que el sector empresarial está en condiciones de poder aportar no solo en materia de impuestos transitorios sino en lo permanente con una mayor tasa.

La Concertación, al comienzo de su Gobierno el año 90, llegó a una negociación con uno de los principales actores de la oposición y quien es hoy día, el Presidente de la República. Entonces, elevamos el impuesto a la renta del 10 al 15 por ciento, y se nos hizo la misma observación que ahora: que eso iba a afectar la inversión y casi que iba a producirse una debacle en el manejo de la economía.

Pero  el resultado fue que la economía creció durante cinco años al 7 por ciento. Por qué se dice que el alza de la tasa de impuestos va a afectar realmente a la inversión. Al contrario, creo que existe conciencia en el sector empresarial de que éste es un aporte necesario no solo por lo transitorio del terremoto, sino que por la necesidad de enfrentar otras obligaciones que el país tiene con muchos sectores que hoy día están esperando respuesta a sus propias necesidades.

En cuanto a los temas relacionados con el royalty minero, me parece bien que lo vinculemos a la variación del precio del cobre, y que tenga una tasa baja en un momento de bajos precios del metal, y que tenga una mayor tasa cuando el ciclo sea más favorable.

Sin embargo, creo que incluso las empresas mineras estarían en condiciones de hacer un aporte mucho más importante, por el nivel de utilidades que han tenido y que tienen y pueden tener en el próximo tiempo.

Por otro lado, creo que es un error haber otorgado un trámite por separado al proyecto de ley de Donaciones y no entiendo por qué el gobierno no lo incluyó dentro del paquete de financiamiento del plan de reconstrucción, sobre todo cuando este proyecto de donaciones es de poco rendimiento, e incluso incierto.

Uno nunca puede calcular exactamente cuánto va a donar el sector privado para una emergencia como esta. Además, este proyecto de donaciones, de acuerdo con lo que nos ha dicho el Ejecutivo, tendría un rendimiento del orden de 300 millones de dólares en el período completo, es decir, representa apenas un 3% dentro de un gasto de más 9 mil millones que cuesta la reconstrucción.