Se confirma mal rumbo de la economía chilena

Los últimos días hemos conocido una serie de indicadores económicos, los cuales han sido peores de lo que todos esperábamos.

Tenemos el IMACEC de junio, Indice Mensual de Actividad Económica, que creció sólo un 0,8% con respecto a igual mes del año pasado, muy por debajo de todas las expectativas.

Tenemos un desempleo que comienza a crecer, llegando en el trimestre móvil de marzo, abril y mayo a un 6,6%.

El IPC de junio, por su parte, se ubicó en un 0,5%, también por sobre las expectativas, ya que esta cifra significa un IPC acumulado durante los primeros seis meses del presente año, de un 2,3% y de un 4,4% acumulado en 12 meses. Este nivel de inflación se registra por sobre el rango previsto por el Banco Central, quien ha establecido un horizonte inflacionario de 3%.

Por parte del Gobierno, el ministro de Hacienda ha reconoció el lunes 6 de julio frente a la Comisión Mixta de Presupuesto del Congreso Nacional, que el nivel de gasto público para este año será mucho mayor al previsto en la ley de presupuesto, en la cual se planificó un gasto fiscal con un déficit de 1,9% del PIB, lo cual ya era un cifra importante, sin embargo, el ministro informó que el déficit fiscal efectivo para 2015 ascenderá a 3% del PIB.

Esto significa que faltan 7 mil 200 millones de dólares para cuadrar los ingresos con los gastos, y ello obliga al fisco a endeudarse de manera muy significativa para cubrir dicho faltante.  

Frente a este escenario tan adverso para la economía nacional, hago un enérgico llamado al Gobierno para que rectifique el rumbo en materia económica, donde el impacto de las reformas se ha vuelto innegable. Aún es tiempo de enmendar el camino mediante un mayor diálogo y la moderación de políticas que no le están haciendo ningún bien al país.