Propuesta de Indulto Bicentenario de la Iglesia genera discrepancias entre senadores

Dispares reacciones entre los senadores de distintos sectores políticos generó la propuesta de Indulto Bicentenario que entregó la Iglesia Católica al Presidente de la República, Sebastián Piñera. Cabe recordar que el Mandatario se comprometió a estudiar el documento, tras lo cual anunciará si envía o no al Parlamento un proyecto de ley en ese sentido.

Pero anticipándose al debate que se podría dar en el Congreso, los senadores Juan Antonio Coloma, Eduardo Frei, Lily Pérez, Soledad Alvear, Hernán Larraín, Isabel Allende, Ignacio Walker, Camilo Escalona y Andrés Zaldívar manifestaron sus puntos de vista sobre la propuesta.

Mientras los parlamentarios de la Alianza acogieron favorablemente el planteamiento de la Iglesia, con algunos matices; los legisladores de la Concertación anunciaron su rechazo a cualquier beneficio carcelario para quienes cometieron delitos contra los derechos humanos.

El senador Coloma, expresó que no es partidario de los indultos por los efectos que ello pudiera tener en materia de seguridad pública, una de las prioridades de la agenda gubernamental, pero advirtió que "siempre hay que tener el corazón abierto para oír alternativas en momentos importantes de encuentro y de reconciliación".

Agregó que "en la medida que no sean penas de carácter perpetuo y que haya una conducta adecuada, uno tiene que estar dispuesto a considerar la propuesta que en definitiva el gobierno y el Parlamento puedan hacer".

En tanto, el senador Frei manifestó que si el indulto contempla beneficios a condenados por violaciones a los DD.HH. "sería una burla contra aquellos que durante años lucharon por conocer la verdad, sería una burla para aquellos como la familia Prats que después de 30 y tantos años lograron saber quienes fueron los asesinos del general, por lo tanto sería una burla para tantos casos de derechos humanos que no se han cerrado y que están en proceso".

Agregó que el "gobierno tiene que tomar la decisión crucial: o manda una ley general de indulto al Parlamento o tratará caso a caso. En el caso que mande una ley al Parlamento ya sabe nuestra posición".

Por su parte, la senadora Lily Pérez -presidenta de la Comisión de DD.HH de la Cámara Alta- dijo ser contraria a la aplicación de un indulto general, anticipando su rechazo a un eventual proyecto de ley. A su juicio, este beneficio sería "una señal equívoca hacia la sociedad, porque un indulto general va en la línea absolutamente opuesta de lo que espera la gente del gobierno".

La senadora Alvear reconoció el derecho de la Iglesia a preocuparse por esta materia, pero manifestó que se debe distinguir entre delitos comunes y los de lesa humanidad.

Asimismo, dijo que "creo que el indulto debe existir en circunstancias excepcionales y que debe quitarse esa facultad al Presidente de la República y que deben otorgarlo los jueces de ejecución de penas que velan por cuál ha sido la conducta de la persona  privada de libertad y que en definitiva puedan, atendidas las consideraciones, determinar que una persona reúne los requisitos para el indulto".

ESTUDIO NECESARIO

En tanto, el senador Larraín, argumentó que "esta propuesta nos ayudará a abrir el corazón para apoyar y comprender la situación de gente que está sufriendo los rigores de castigos muy duros, privativos de libertad en la cárcel".

A su turno, la senadora Allende manifestó que "se insistió en que  los autores de hechos de sangre y delitos de lesa humanidad -sean civiles o militares- no puedan recibir beneficios, ni menos un indulto.  Aceptar eso es violar convenciones internacionales y nuestros propios principios en el tema. En eso, amplios sectores hemos sido enfáticos".

El senador Zaldívar, por su parte, valoró la propuesta integral de la Iglesia pero anticipó que "en el Parlamento nosotros no vamos a dar los votos para ningún indulto o propuesta de indulto que pueda beneficiar a condenados por delitos de lesa humanidad". El legislador agregó que "el indulto es una facultad del Presidente de la República y él tiene que asumir esa responsabilidad".

El senador Escalona, manifestó que "no debe ser extensiva la clemencia a quienes son los autores del terrorismo de Estado, que es una herida aún sangrante en el corazón de nuestra patria".

El parlamentario señaló que "la Iglesia Católica ha dado a conocer una propuesta legítima para recabar clemencia de la sociedad chilena respecto de personas que, habiendo delinquido, requieran por su avanzada edad o por su estado de salud, un beneficio carcelario que contribuya sea a aminorar su situación carcelaria o, incluso, a abrir posibilidades de su puesta en libertad. Sin embargo, incluir en tal aspiración de generosidad y clemencia a quienes violaron los derechos humanos y que son los autores de los crímenes de lesa humanidad, en mi opinión, tales personas no se merecen tal generosidad".

Finalmente el senador Ignacio Walker señaló que "acogemos el llamado de los Obispos chilenos en términos de entender que la paz es obra de la justicia, la verdad, el perdón y la misericordia", pero advirtió que "a nuestro juicio, hay dos limitaciones a la dictación de un indulto de este tipo, y los posibles beneficiarios: los más graves crímenes de sangre, en la perspectiva de una sociedad que debe combatir la delincuencia con mucha firmeza, y las más graves violaciones a los derechos humanos cometidas bajo la dictadura".